El balance de víctimas mortales a consecuencia del doble atentado suicida perpetrado este viernes contra un santuario chií de Bagdad se ha elevado a 60 y más de un centenar de personas han resultado heridas, según ha informado la Policía.
Dos terroristas suicidas con cinturón de explosivos se inmolaron durante el rezo del viernes en la entrada del santuario del Imán Moussa al Kadhim, uno de los más importantes de la confesión chií en Irak y situado en el barrio de Kadhimiya, objetivo frecuente de los grupos insurgentes suníes.
Dos días negros
Por segundo día consecutivo, Irak ha sido escenario de matanzas que no se veían desde hace más de un año. Ayer, dos atentados suicidas en Bagdad y la provincia de Diyala provocaron casi 90 muertos y más de un centenar de heridos.
Los ataques coinciden con el debate sobre la salida de las tropas estadounidenses de las ciudades iraquíes, que tiene previsto ocurrir dentro de poco más de un mes, como paso previo a la retirada total planeada para finales de 2011.