El balance de víctimas de los atentados que sacudieron ayer a Irak ha ascendido a catorce muertos y 49 heridos, según ha informado la agencia iraquí de noticias NINA.
En el atentado más sangriento, al menos once personas han muerto y otras 23 han resultado heridas a causa de la explosión de un coche en la localidad de Buhriz, situada a unos 60 kilómetros al noreste de Bagdad. Asimismo, ocho personas han resultado heridas en la capital a causa de la explosión de una bomba en un mercado de vegetales y frutas.
En la localidad de Tarmiya, ubicada al norte de Bagdad, dos policías han muerto y otros 15 han resultado heridos a causa del estallido de un coche bomba y un artefacto explosivo al paso de dos patrullas en diferentes puntos de la ciudad.
Ataque en Baquba
Por otra parte, un agente ha muerto y otros tres han resultado heridos en un ataque con morteros contra una comisaría de la localidad de Baquba, mientras que otros dos agentes han resultado heridos por la explosión de una bomba en Ramadi.
Aunque de momento ningún grupo se ha atribuido la autoría de los ataques de este domingo, varios atentados con bomba de gran alcance perpetrados este año en Irak han sido reivindicados por insurgentes suníes, muchos de ellos vinculados con la red terrorista Al Qaeda. La violencia en Irak ha alcanzado su nivel más alto en al menos cinco años y Bagdad ha sufrido ataques casi a diario. Según la ONU, este año han muerto más de 8.000 personas.
El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, advirtió a finales de octubre de que su país se enfrentaba "a una guerra genocida" e hizo un llamamiento en favor de la celebración de una conferencia internacional para hacer frente al terrorismo en Irak.
Coches bomba provocan 22 muertos en Irak
