La Policía australiana ha detenido hoy a un hombre tras acordonar durante dos horas el Parlamento del estado australiano de Nueva Gales del Sur --en Sidney-- después de que éste aparcara su vehículo delante del edificio y solicitara reunirse con el primer ministro del estado, Barry O'Farrell, tras presuntamente asegurar tener una bomba.
Tras dos horas de negociaciones a través de notas entregadas por el hombre y medidas de seguridad, entre ellas la evacuación del edificio y los alrededores, varios agentes se han acercado al vehículo y han roto sus ventanillas lanzando una bomba de humo para sacar por la fuerza al sospechoso, según ha informado la cadena de televisión australiana ABC.
Posteriormente, varios de ellos consiguieron reducirle y alejarle del vehículo para introducirle en una ambulancia, tras lo que los policías han sacado un objeto del interior del coche, si bien por el momento se desconoce de qué se trata. Tanto el coche como el objeto están siendo analizados por especialistas.
Un portavoz de la Policía ha indicado que el hombre "se encuentra bien y bajo custodia", al tiempo que ha indicado que los paramédicos le realizarán pruebas, tal y como ha recogido el diario australiano 'The Sydney Morning Herald'.
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