Jóvenes y no tan jóvenes de todo Centroamérica se han dado cita en San José para asistir la noche del martes al primer y único concierto que dará en la región el grupo de heavy metal inglés Iron Maiden, ante la atenta mirada de la policía costarricense que teme la entrada de pandilleros en el país.
Desde el viernes se han ido congregando, procedentes de todo Centroamérica, miles de 'metaleros' en los alrededores del estadio Ricardo Saprissa de la capital costarricense, donde a partir de las 20H00 horas locales (02H00 GMT) atronarán los acordes del mítico grupo.
Haciendo bueno el adagio de que los viejos rockeros nunca mueren, este martes los Iron Maiden se van a encontrar con varias generaciones reunidas entre este público centroamericano incondicional.
El 'tico' Germán Volio, de 37 años, se ha traído a su hijo Germán de 15, para ver en carne y hueso a los propietarios de esas voces desgarradas que ha escuchado "desde que tiene uso de razón" y ver convertido "su sueño en una realidad".
Pese a que vive y trabaja en San José, ha pedido cuatro días de vacaciones para poder entrar de los primeros en el estadio cuando abra sus puertas hacia las 16h00 (22H00 GMT).
Su compatriota Silvestre González, 30 años, que normalmente suele garantizar la seguridad de los grupos de rock que vienen al país, en esta ocasión no ha querido tener las limitaciones del deber para poder disfrutar a tope con sus ídolos de toda la vida.
"Escucho a los Maiden desde los 11 años", asegura este aficionado de la escultura en piedra, que como no podía ser de otra forma, ha esculpido la calavera que simboliza al grupo en un pedazo de granito.
Las chicas son minoría, pero Ana Hiskey, estadounidense de 30 años y 'broker' en una empresa de su país en Costa Rica, no ha querido perderse la música en vivo del grupo que utiliza cada mañana para "darse fuerza" antes de empezar la venta de acciones.
Al salvadoreño Oliver Ramírez no le han importado las 21 horas que tuvo que pasar en el bus ni que tuviera que adelantar sus vacaciones porque no había plaza.
Desde el viernes, los alrededores del estadio se han convertido en su 'hotel' y un pedazo de cartón en su cama.
El frío de la noche lo ha combatido jugando partidos de fútbol y el tiempo lo ha pasado escuchando música y haciendo amigos locales, que le han permitido ir a bañarse a sus casas.
Como si de una experiencia místico-religiosa se tratara, la imaginación de Oliver "no alcanza a saber cómo será lo que he estado esperando desde hace tantos años".
Otros compatriotas, que han venido más tarde, se han pasado más de 30 horas en el bus, sometidos a fuertes controles de la policía costarricense, preocupada por el eventual ingreso de pandilleros al país.
Su compatriota Eric Bernal se pregunta por qué los Maiden eligieron Costa Rica para dar su único concierto en Centroamérica "si en El Salvador hay mayor movimiento metalero".
Pero, según datos de los asistentes, la presencia de 1.600 guatemaltecos casi duplica a la de salvadoreños y no digamos a nicaragüenses, panameños u hondureños.
Este momento histórico no se lo podía perder Rudy López, guatemalteco de 34 años que casi se ha venido directo del hospital donde le han extirpado un quiste de la cara, para el concierto.
"El metal no muere", dice mientras muestra la camiseta que ha diseñado con el nombre y los símbolos del grupo estampados sobre una pirámide de Tical.
Esta fauna urbana, vestida de negro, mata el tiempo pasándose una pelota, que invariablemente cae encima del bus de la policía.
"No se puede permitir que golpeen la unidad", dice el agente Heladio Obando, porque "las antenas de comunicación podrían dañarse", aunque en dos ocasiones han tenido que acceder a las súplicas de los propietarios y a los silbidos e increpaciones de la masa y devolverles la pelota previo apretón de manos.
af/du
Relacionados
- Prisa pone sus ojos en el mercado en inglés de EEUU, en el que centrará su inversión los próximos años
- Prisa centrará inversión próximos cinco años en mercado americano en inglés
- El Corte Inglés pisa el acelerador y entra en el 'renting' de coches
- A Telefónica le pitan los oídos en inglés
- Zapatero destinará 85 millones para que 51.000 jóvenes aprendan inglés