La seguridad en los aeropuertos se ha convertido en una obsesión y cada vez es más difícil pasar a la zona de embarque: sacarse las botas y el cinturón, mostrar las llaves y cualquier otro objeto que vaya en los bolsillos, meter los líquidos en bolsas transparentes... Para asegurarse de que los pasajeros no transportan objetos peligrosos en sus zapatos y facilitar un poco el trámite a los pasajeros, Israel ha implantado en su aeropuerto un escáner para pies.
El Magshoe es un escáner específico para zapatos, un aparato de rayos X que permite inspeccionar el calzado del viajero sin que este tenga que quitárselo.
En cuestión de segundos, Magshoe detecta si el pasajero que está montando encima lleva algún metal inusual escondido, desde un cuchillo hasta un detonador.
En 18 países
Este nuevo aparato no solo agiliza la llegada del viajero al avión sino que garantiza la máxima seguridad. El equipo se asegura de que no quede nada escondido ni dentro del zapato, ni entre los calcetines del pasajero. Esta nueva máquina se está probando ahora en los aeropuertos de 18 países, entre ellos España.