
Altos funcionarios de inteligencia de Estados Unidos han llegado a la conclusión de que el gobierno de Corea del Norte está "involucrado" en los recientes ataques a Sony Pictures, una conclusión que llega justo cuando la compañía ha cancelado el estreno de la comedia basada en un complot para asesinar a Kim Jong-un, el líder de Corea del Norte.
Altos funcionarios del gobierno, que no han querido hablar oficialmente sobre la investigación, han explicado al New York Times, que la Casa Blanca todavía esta debatiendo la posibilidad de acusar públicamente a Corea del Norte de lo que equivale a una campaña de terrorismo cibernético.
Las autoridades de inteligencia afirman que no esta claro cómo responderá la Casa Blanca. Algunos miembros de la administración de Obama argumentan que el gobierno del Kim debería ser confrontado directamente, pero eso plantea la cuestión de qué represalias deberían imponerse. Además obligaría a EEUU ha hacer públicas parte de las pruebas que ligan al gobierno norcoreano con el ataque.
La decisión de Sony de cancelar el lanzamiento de la cinta "The Interview" o "La Entrevista" se produce tras las amenazas enviadas por los hackers esta semana que indicaron que planeaba ataques en los cines si la película se estrenaba en EEUU.
"A la vista de la decisión de la mayoría de distribuidoras de no proyectar The Interview, hemos decido no seguir adelante con el estreno en salas previsto para el 25 de diciembre". Con estas palabras se refierió Sony a uno de sus mayores fiascos comerciales, empresariales y políticos. La cinta, que ya era bastante polémica por su argumento (una comedia de acción en la que el objetivo de dos agentes de la CIA es matar al dictador norcoreano Kim Jong-Un), ha ocupado en los últimos días la atención mundial después de que un grupo de hackers accediesen a los servidores de Sony y, a través de ellos, filtrasen imágenes del final del filme y correos internos de la productora.
La revelación dio paso de inmediato a la amenaza -por parte del mismo grupo de atacantes, o de terceros oportunistas- contra aquellas salas que emitiesen The Interview. "Sony Pictures ha sido la víctima de un ataque criminal sin precedentes contra nuestros empleados, nuestros consumidores, y nuestro negocio. Aquellos que nos atacaron robaron nuestra propiedad intelectial, correos electrónicos privados y material sensible protegido por los derechos de autor", señaló la companía.