Por Nidal al-Mughrabi
GAZA (Reuters) - Los cristales y escombros ocupaban la carretera hacia la casa de Ahed Marouf en un pueblo al norte de Gaza el lunes mientras montaba en un carro tirado por un burro con su mujer y sus tres hijos para comprobar el estado de su casa durante la tregua de siete horas declarada por Israel.
Lo que vieron cuando alcanzaron Beit Lahiya, cerca de la frontera con Israel, les convenció para regresar a su refugio temporal en la escuela de Naciones Unidas en el campo de refugiados de Jabalya.
"No se sentía seguro", dijo Marouf, un granjero de 30 años. "En nuestra casa, las ventanas estaban rotas. No había electricidad ni agua", dijo.
Junto otros miles de residentes, Marouf y su familia huyeron a Beit Lahiya - por insistencia de Israel - durante los feroces combates entre las fuerzas israelíes y los militantes palestinos. Israel atacó desde tierra y aire mientras los militantes lanzaron docenas de bombas de mortero.
Israel dijo que la breve tregua tenía como intención permitir el paso de algunos de los cientos de miles de palestinos desplazados de sus casas durante las casi cuatro semanas de enfrentamientos bélicos. El grupo islamista Hamás, que domina Gaza, dijo que la tregua era un ardid mediático.
En la carretera principal que conduce a Beit Lahiya, un grupo de altos edificios de viviendas que antes albergaba a cientos de familias de pocos recursos parecía haber sido acribillado con cañones de tanques, y estaba destruido hasta el punto de no tener arreglo.
"Sólo un alto el fuego permanente de ambos lados podría convencernos de volver a casa para quedarnos. Por ahora, nos quedaremos en la escuela de la ONU", dijo la esposa de Marouf, Mervat, de 23 años.
Además, dijo que la guerra se había prolongado demasiado y se quejó por no poder tratar a sus hijos de gripe y dolores estomacales en los hospitales locales porque estos estaban abrumados por la cantidad de heridos por bombardeos israelíes.
En la ciudad de Gaza, docenas de personas hicieron colas en bancos y cajeros automáticos para sacar dinero.
Otros abarrotaron las tiendas de comestibles durante la tregua, la cual los palestinos acusan a Israel de haber violado con un ataque donde murió una niña de ocho años y otras 29 personas resultaron heridas en un campo de refugiados en Gaza.
"La destrucción está por toda Gaza", dijo Mervat Marouf.
"Llegamos con tristeza. Nos vamos con tristeza", dijo.