CHENNAI India (Reuters) - Cuarenta y siete personas han muerto en el derrumbe de un edificio en la ciudad de Chennai, en el sur de India, en el último desastre que pone de relieve las pocas medidas de seguridad en un sector de la construcción en auge en el país.
El edificio de 11 plantas que estaba en construcción en el estado de Tamil Nadul se derrumbó el sábado tras unas fuertes lluvias. No estaba claro cuánta gente había en el edificio en ese momento.
La cifra de personas rescatadas con vida se ha elevado ahora a 27, según dijo a Reuters el agente de policía Karuna Sagar, mientras continúan las operaciones de búsqueda. Seis personas, entre ellas directores de la empresa de construcción e ingenieros, han sido detenidas en relación con el derrumbe, dijo Sagar.
Las laxas normas de construcción, pobremente aplicadas ante la demanda creciente de viviendas, han resultado en derrumbes frecuentes y letales en toda India.
Muchos de los fallecidos son inmigrantes pobres que acaban viviendo o trabajando en edificios construidos de forma ilegal y precipitada, en o cerca de ciudades importantes que ofrecen alquileres bajos.
El sábado diez personas, entre ellas tres niños, murieron en la capital Nueva Delhi después de que un bloque de apartamentos de 50 años con 14 ocupantes se derrumbara. Más de 50 personas murieron cuanto otro bloque de pisos se derrumbó en Mumbai en septiembre.
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