Global

Once muertos en un atentado contra trabajadores electorales en Afganistán

MAZAR-I-SHARIF Afganistán (Reuters) - Once personas, entre ellas trabajadores electorales, murieron en Afganistán cuando una bomba en una carretera destrozó su autobús, dijo el domingo el gobernador de la provincia de Samangan, en el norte del país.

El atentado tuvo lugar el sábado por la noche, después del cierre de las urnas para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en las que los afganos eligen al sucesor del presidente Hamid Karzai, en el que se espera sea el primer traspaso democrático del poder en el país.

"Tres empleados locales de la IEC y dos observadores del equipo del doctor Abdula estuvieron entre ellos", dijo a Reuters el gobernador de Samangan, Jairula Anosh, refiriéndose a la Comisión Electoral Independiente y al candidato Abdula Abdula.

Las elecciones han enfrentado a Abdula, un antiguo líder de la Alianza del Norte que combatió a los talibanes y durante un tiempo fue ministro de Asuntos Exteriores con Karzai, contra el antiguo economista del Banco Mundial Ashraf Ghani, que también fue ministro de Finanzas.

Quien sea que tome el poder, deberá afrontar una difícil situación de seguridad, con la retirada de las tropas internacionales a final de año y una potente insurgencia talibán, así como una creciente crisis económica.

Con los 11 muertos en el autobús, el número de víctimas mortales civiles de la jornada electoral sube al menos a 31, según una recopilación de Reuters.

Además, otras 11 personas sufrieron la amputación de los dedos manchados de tinta que indicaban que habían votado, un castigo de los talibanes. Los votantes debían marcar un dedo con tinta para impedirles votar dos veces.

A ellos se suman 11 policías y 15 soldados muertos en combates.

Los talibanes, que tratan de expulsar a las tropas internacionales y a un gobierno que califican de marioneta estadounidense, denunciaron las elecciones como una farsa de Estados Unidos y prometieron sabotearlas.

Se espera que ambos candidatos ratifiquen un acuerdo de seguridad con Estados Unidos que permita la permanencia de un contingente de unos 10.000 militares estadounidenses.

A pesar de la violencia, millones de afganos acudieron a las urnas el sábado y la comisión electoral dijo que la participación superó los siete millones de personas, una cifra similar a la de la primera vuelta en abril.

Los observadores y otras autoridades en Kabul temen que un resultado igualado en un proceso lleno de acusaciones de fraude podría dificultar que el perdedor reconozca su derrota.

El sábado por la noche, Abdula ya cuestionó la cifra de participación de la comisión, mientras que Ghani dijo que parece haber ganado, basándose en sus cálculos.

Los resultados preliminares no se esperan hasta el 2 de julio.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky