Global

Alemania, preocupada por que el caso Deutsche dañe su imagen

El escándalo de espionaje que afecta a la mayor empresa de telecomunicaciones de Europa, Deutsche Telekom, amenaza con dañar la imagen de Alemania como un centro de negocios, advirtieron el domingo destacados responsable oficiales.

La fiscalía alemana está investigando a la compañía después de que ésta reconociera que había espiado ilegalmente grabaciones telefónicas en 2005, en medio de acusaciones de que la empresa trataba de impedir las filtraciones de miembros del consejo de administración a periodistas.

"Un problema para Alemania"

"El daño ya ha ocurrido y el alcance se extenderá más allá de Deutsche Telekom", dijo el subsecretario de Economía alemán, Bernd Pfaffenbach al periódico Tagesspiegel del lunes.

"Podría llegar a ser un problema para toda Alemania si no actuamos con rapidez", añadió.

El caso es el último de una serie de escándalos corporativos que han sacudido Alemania - el mayor exportador del mundo y la mayor economía de Europa -, cuya identidad de posguerra se ha basado en su economía y el valor de sus empresas.

En los últimos años, el fabricante Volkswagen, el mayor de Europa, y la mayor corporación alemana, Siemens, se han visto sumidas en asuntos que han acabado en los tribunales.

Un asunto especialmente delicado

El espionaje es un asunto particularmente delicado en Alemania, que aún recuerda la Gestapo de Hitler y la policía secreta del este de Alemania, la Stasi.

El ministro del Interior alemán, Wolfgang Schaeuble, también ha declarado que el escándalo podía afectar a la fe de los alemanes en personalidades destacadas.

"Si no llegamos a una situación en la que la élite entienda que la confianza y el comportamiento según la ley es lo que se espera de ellos, las cosas serán difíciles", dijo el ministro al periódico Welt am Sonntag.

El presidente de DT

El presidente de DT, Rene Obermann, que ha reconocido que sabía del seguimiento de las llamadas pero no lo hizo público, negó que estuviera implicado.

"Si alguien dice que estoy implicado en este asunto, se trata de un ultraje", dijo a la revista Focus.

Obermann y otros representantes del sector de las telecomunicaciones han sido convocados el lunes en el Ministerio del Interior de Berlín para abordar el asunto, que Pfaffenbach dijo que esperaba poder aclarar pronto para evitar una crisis de confianza.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky