La vicesecretaria general de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios y Ayuda de Emergencia, Valerie Amos, ha asegurado este sábado que "casi no quedan lugares seguros" en Siria para los ciudadanos.
"Una violencia recrudecida implica que casi no quedan lugares seguros para los civiles en Siria. La población está desesperada. La violencia debe cesar", ha reclamado Amos, en su cuenta en la red social Twitter.
Asimismo, la Oficina Para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés), al frente de la cual está Amos, ha urgido a la comunidad internacional que suministre más fondos para proveer ayuda humanitaria a la población desplazada y refugiada.
"Mientras la violencia se intensifica en escala y ámbito, el número de víctimas, desplazamientos y destrucción continúa ascendiendo", subraya la OCHA en su perfil en Twitter. "Se necesitan más fondos urgentemente", agrega.
Más de 70.000 personas han fallecido en Siria a causa de la represión y de los combates entre el Ejército sirio y las fuerzas rebeldes. Más de un millón de personas han cruzado las fronteras con Turquía, Líbano, Jordania e Irak para escapar de la violencia, según los cálculos realizados por la ONU.
Las agencias de ayuda humanitaria alertaron la semana pasada que, de no aumentar las donaciones, se quedarán pronto sin fondos para financiar ayuda humanitaria para la población desplazada y refugiada debido al conflicto que golpea Siria desde marzo de 2011.
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