
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, condenó hoy "firmemente" el asesinato del dirigente opositor tunecino Chukri Bel Aid y pidió que la transición democrática en ese país no descarrile por la violencia política.
Ban considera que Túnez ha realizado "importantes progresos" en su transición a la democracia, según indicó un comunicado de su portavoz.
Sin embargo, consideró que "queda mucho por hacer" respecto a "las demandas sociales y económicas del pueblo tunecino".
El secretario general instó a las autoridades del país magrebí a seguir avanzando en el proceso de reformas políticas. "La transición democrática de Túnez no debe descarrilar por actos de violencia política", insistió.
Desde que comenzó la transición tras la caída del presidente Zin el Abidín Ben Ali, el 14 de enero de 2011, se han registrado episodios intermitentes de violencia contra políticos, sindicalistas, artistas y periodistas.
La oposición culpa de esos brotes de violencia a las denominadas Ligas para la Protección de la Revolución, compuestas por simpatizantes del partido gubernamental, de orientación islamista, y salafistas.