
Una pareja de turistas italianos se percatan de la leve inclinación que sufre el Big Ben al comparar la fotografía publicada por el Daily Telegraph con las instantáneas que han podido tomar con su cámara digital. "¿Lo ves como está inclinada? ¡Lo dicen los periódicos!".
¿Una nueva Torre de Pisa?
Giovanna Sirelli y su marido Andrea comprueban que lo que dicen los periódicos es cierto: el Big Ben está inclinado, llegando a parecerse a la famosa Torre de Pisa. Así lo recoge EL MUNDO en su blog.
Al parecer, la inclinación que sufre el famoso reloj de Londres es de casi medio metro (435 milímetros) hacia el noroeste, de tal manera que si algún día cayera podría aplastar las oficinas de Portcullis House.
Las posibles causas de la inclinación
Los aparcamientos construidos bajo el Palacio de Westminster, las ampliaciones y las obras del metro han acelerado la inclinación de la torre, que data de 1858. Aseguran que entre noviembre de 2002 y agosto de 2003 el Big Ben sufrió una inclinación de 3,3 milímetros, y predicen que la inclinación anual estimada es de 0,9 milímetros y su ángulo de trazado de 0,26 grados.
Si todas estas estimaciones fueran correctas en su totalidad, dentro de 4.000 años el Big Ben podría correr la misma suerte que la Torre de Pisa y llegar a tener también una inclinación de cuatro grados.
Además, en la Casa de los Comunes están apareciendo grietas que podrían atribuirse a la fuerza que estaría produciendo la torre.
El profesor John Burland, del Imperial College de Londres, ha declarado al Daily Telegraph que los turistas están en lo cierto. Burland acaba de divulgar las conclusiones de un estudio del Parlamentary Estates Department en el que afirma que ante este hecho no será necesario tomar medidas en los próximos años, aunque habrá que estar pendiente ante una posible aceleración de la inclinación.