El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha anunciado la suspensión de todos los contactos con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) como consecuencia de la reciente ofensiva del grupo terrorista separatista kurdo que ha causado decenas de bajas entre los militares desplegados en el sureste de Turquía de mayoría kurda.
"Las negociaciones están ahora en el cajón. Esta lucha seguirá hasta que el PKK deponga las armas", ha afirmado Erdogan en una entrevista concedida a los periodistas que le acompañaban en el avión que ha llevado de vuelta a Turquía al primer ministro después de participar en la sesión anual de la Asamblea General de la ONU, en Nueva York.
Los analistas de los medios turcos han interpretado estas declaraciones como el fin de los contactos entre el Estado y el PKK, incluidos los que mantenían con el líder kurdo Abdulá Ocalan, capturado en 1999 y preso ahora en la isla de Imrali, en el mar de Mármara.
Sin embargo, Erdogan no ha cerrado la posibilidad de una negociación política con el Partido Paz y Democracia (BDP), el principal partido kurdo con representación en el Parlamento turco pero que, sin embargo, ha renunciado a participar en la cámara en protesta por la ilegalización y persecución judicial a activistas políticos kurdos.
Negociaciones políticas
"Si el BDP entra en el Parlamento, entonces habrá negociaciones políticas con ellos. El resto depende de ellos", ha argumentado Erdogan en declaraciones recogidas por el diario turco Hürriyet en su edición digital.
Con respecto a la lucha contra los terroristas del PKK, Erdogan ha reconocido que están cooperando con Irán y compartiendo información de inteligencia con los servicios secretos iraníes para facilitar la lucha conjunta contra el PKK. Además, ha destacado las iniciativas militares en el sureste del país para responder a los atentados del grupo prokurdo.
"Hasta donde yo sé lo que están haciendo es buscar venganza, ya que han sufrido importantes pérdidas (...). Nuestras unidades de frontera recibirán refuerzos en marzo. Serán más eficaces y tendrán bases permanentes allí. Hay 5.000 nuevos reclutas que están siendo entrenados", ha explicado.
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