
Rebekah Brooks, ex directora de News of the World y mano derecha de Rupert Murdoch, fue puesta en libertad en la medianoche del lunes tras haber sido detenida horas antes en el marco del escándalo por las escuchas telefónicas ordenadas por el tabloide británico.
"Aproximadamente a medianoche, la mujer fue liberada bajo fianza y tendrá que regresar a una comisaría de Londres en una fecha que se fijará para finales de octubre", informó la policía británica en un comunicado.
La policía confirmó que Brooks, de 43 años, fue interrogada en el marco de la investigación sobre acusaciones de interceptación ilegal de buzones de voz y soborno a policías por el periódico News of the World, del que en el pasado fue directora.
Responsable del medio
Brooks renunció el viernes a su puesto de responsable en News International, la unidad británica de News Corp, de Murdoch, pero ha declarado que no estaba al tanto de las acusaciones de que el News of the World pinchó miles de teléfonos, entre ellos el de una adolescente asesinada.
Las revelaciones han sorprendido a la opinión pública y reforzado los temores por las prácticas mediáticas y éticas, y por la influencia de Murdoch sobre distintos líderes británicos y las acusaciones de una relación cercana entre algunos de sus periodistas y la policía.
En uno de los coletazos del escándalo, el jefe de la policía británica, el comisario Paul Stephenson, renunció el domingo en medio de sospechas en torno al papel jugado por la policía en el caso.
En un comunicado que leyó ante la televisión británica, Stephenson dijo que no conocía la magnitud de los pinchazos telefónicos llevados a cabo por el desaparecido diario.
La policía británica ha sido criticada tras ser acusada de aceptar dinero del News of the World y de otros diarios, y de no hacer nada para investigar las escuchas telefónicas.
Stephenson sostuvo que no quería que las críticas a su proceder le distrajeran de la misión de garantizar la seguridad de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
El juego del poder
Varios políticos, de Australia a Estados Unidos, han exigido saber si se han producido abusos similares en lugares donde hay empresas de medios de Murdoch, y el empresario de 80 años se ha visto obligado a asumir una postura defensivo.
En Reino Unido, el primer ministro David Cameron está siendo cuestionado por su amistad con Brooks y por emplear a otro ex editor del diario News of the World, Andy Coulson, como secretario de prensa, incluso después de que Coulson renunciara al periódico en 2007, tras el encarcelamiento de un reportero en un caso de escuchas telefónicas.
"Las aguas definitivamente se están enturbiando bajo los pies de los Murdoch", indicó a Reuters Chris Bryant, miembro del parlamento del opositor Partido Laborista que ha abogado durante años contra las malas prácticas de la prensa.
Tim Bale, profesor de política de la Universidad de Sussex, dijo a Reuters: "Creo que esto ha sido muy incómodo para Cameron y se volverá más incómodo durante la próxima semana".
Brooks, Rupert y James Murdoch, hijo de Murdoch y considerado hasta ahora su heredero, serán interrogados en el Parlamento británico el martes, donde se les preguntará por las informaciones de que News International mintió al Parlamento durante audiencias anteriores.