Al menos 24 personas fallecieron y 75 resultaron heridas en atentados perpetrados el viernes contra una mezquita y un hospital en Tikrit, 160 km al norte de Bagdad y feudo del ex presidente Sadam Husein, según una nueva evaluación de fuentes médicas y de seguridad iraquíes.
Una bomba, que se hallaba escondida en un barril de gasolina cerca de la entrada de la mezquita, explotó poco después de terminar la oración, a la que suelen acudir los notables de la ciudad.
Según un médico del hospital de la ciudad, el centro sanitario recibió 19 cadáveres y 72 heridos tras este primer atentado.
Posteriormente, el propio hospital fue el objetivo de un atentado suicida que provocó otros cinco muertos y tres heridos, en momentos en que un diputado provincial visitaba a una de las víctimas del primer ataque. El diputado sobrevivió, pero dos de sus guardaespaldas fallecieron, agregó este médico, quien solicitó permanecer en el anonimato.