Putin promete vengar el atentado en Moscú

MOSCÚ (Reuters) - El primer ministro ruso, Vladimir Putin, prometió el martes vengar el atentado suicida que mató al menos a 35 personas en el aeropuerto más activo del país, subrayando la incapacidad del Kremlin para detener una creciente oleada de ataques.

En duras declaraciones el día después de los atentados, los líderes rusos ordenaron a los servicios de seguridad que encuentren a los culpables del ataque, que llevaba el sello de los milicianos que combaten por fundar un estado islámico independiente en la región del Cáucaso norte, en la frontera sur de Rusia.

"Éste ha sido un crimen abominable tanto en su sinsentido como en su crueldad", dijo Putin ante una reunión de ministros en Moscú.

"No dudo que este crimen se resolverá y que la retribución es inevitable", añadió.

El presidente, Dmitry Medvedev, criticó a las agencias de defensa de la ley y a los gestores aeroportuarios por el ataque en la terminal de llegadas de Domodedovo, una importante vía de acceso internacional a Rusia y donde murieron al menos ocho extranjeros.

"Debe hacerse todo para encontrar, exponer y llevar a los tribunales a los delincuentes que cometieron este crimen... y las guaridas de estos delincuentes, por muy profundas que las hayan excavado, deben ser liquidadas", dijo a los responsables del Servicio Federal de Seguridad (FSB, en sus siglas en inglés), responsable de coordinar la lucha de Rusia contra el terrorismo.

El ataque se produjo apenas unos días antes de que Medvedev haga campaña en favor de Rusia ante inversores y líderes corporativos en el Foro Económico de Davos, en Suiza.

Medvedev ha retrasado su salida hacia Davos, donde tenía previsto ofrecer el discurso inaugural del foro. La ministra rusa de Sanidad, Tatyana Golikova, dijo que 49 de los heridos en el aeropuerto permanecían en estado grave o muy grave en el hospital.

En el Instituto de Cirugía Vishnevsky de Moscú, el cirujano Sergei Sapelkin dijo a Reuters que había tres personas en situación crítica, con quemaduras graves o daño en los órganos internos debido a metralla de la bomba, que según las autoridades estaba llena de esquirlas de metal.

El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas guardó un minuto de silencio el martes en memoria de las víctimas.

El presidente de EUU, Barack Obama, habló con Medvedev por teléfono, expresando sus condolencias y su "fuerte condena a este escandaloso ataque contra civiles inocentes", indicó la Casa Blanca. Obama también prometió trabajar con Rusia para combatir el terrorismo.

CRECIENTE INSURGENCIA ISLAMISTA

Nadie se ha atribuido la responsabilidad del atentado, pero Rusia lleva tiempo combatiendo una creciente insurgencia islámica en muchas repúblicas islámicas del Cáucaso Norte.

Los rebeldes de la región han amenazado con atacar ciudades y objetivos económicos antes de las elecciones parlamentarias del próximo diciembre y de los comicios presidenciales de 2012, donde se espera que Putin regrese al Kremlin o respalde a su protegido Medvedev en una segunda legislatura.

"El terrorismo sigue siendo la principal amenaza a la seguridad de nuestro estado, la principal amenaza a Rusia, a todos nuestros ciudadanos", dijo Medvedev. El presidente señaló que los ataques aumentaron el año pasado, en lo que describió como "la señal más seria" para las fuerzas de la ley.

"Está claro que hay una incapacidad sistémica para ofrecer seguridad a la gente (en Domodedovo)", afirmó Medvedev.

El presidente dijo al FSB que garantice una seguridad adecuada en próximos internacionales, incluyendo los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014, que se celebran en Sochi, en la frontera del Cáucaso Norte.

También ordenó al Ministerio del Interior que recomiende el despido de oficiales de seguridad de transportes y advirtió de que las autoridades a las que se determine culpables serían consideradas responsables.