QUETA (Reuters) - Un potente seísmo de magnitud 7,2 sacudió el suroeste de Pakistán la madrugada del miércoles, despertando a residentes asustados en ciudades tan apartadas como Nueva Delhi y Dubái, pero el epicentro estuvo bastante lejos de los principales centros de población.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS por su sigla en inglés) dijo que el seísmo tuvo una profundidad de más de 80 kilómetros y ocurrió cerca de la ciudad de Dalbandin en la provincia de Baluchistán, cerca de las fronteras con Afganistán e Irán.
El secretario de Interior de la provincia de Baluchistán, Akbar Durrani, dijo que no había informaciones de víctimas.
"Ha habido daños parciales a casas en pueblos cerca de Dalbandin, pero no hubo víctimas", dijo a Reuters.
Naim Shah, jefe de la policía de Dalbandin, declaró que no había informaciones de muertos ni de heridos.
"No ha habido pérdidas humanas", dijo Shah. "Se cayeron las paredes de algunas casas y oficinas pero no hay informaciones de víctimas".
El USGS precisó que el epicentro estuvo a 55 kilómetros al oeste de Dalbandin, una población de 15.000 personas, y que la profundidad fue de 83 kilómetros.
Las pobres comunicaciones retrasaron las informaciones desde esta zona remota, pero a pesar de lo fuerte del temblor, su profundidad parece haber limitado los daños.
En Queta, la ciudad más grande de Baluchistán y 331 kilómetros al noreste del epicentro, una mujer falleció en un hospital de un ataque cardíaco después del seísmo, dijeron responsables.
En el principal puerto paquistaní de Karachi, a unos 400 kilómetros de distancia, la gente se despertó asustada y salió corriendo de sus casas tras el temblor ocurrido a las 1.23 hora local (2023 GMT del martes).
El Centro de Tsunamis del Pacífico dijo que el seísmo en tierra no había provocado un tsunami en el océano Indico.
Un terremoto de esa magnitud, si se produce a poca profundidad y cerca de zonas habitadas, es capaz de causar extensos daños, y podría suponer nuevas tensiones en un país que se está recuperando de devastadoras inundaciones del año pasado que dejaron a más de 10 millones de personas sin hogar.
El 8 de octubre de 2005, un terremoto de magnitud 7,6 ocurrido a 95 kilómetros al noreste de la capital paquistaní, Islamabad, provocó más de 70.000 muertos.
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