JUBA, Sudán (Reuters) - Hombres armados mataron a 10 sudaneses en una emboscada, dijo un ministro del sur el martes, tercer día de un referéndum sobre la independencia de Sudán del Sur, aunque los votantes han desafiado las lúgubres perspectivas y han acudido a votar en multitudes.
El ataque contra un convoy de personas que regresaban al sur para el referéndum ha sido el último incidente violento conocido que afectar a la consulta, de la cual se espera que el sur emerja como una nueva nación.
Los organizadores dijeron a Reuters que la alta participación registrada hasta ahora casi garantizaba que se llegaría al 60 por ciento de los votos necesarios para que la consulta fuera válida.
"Varias personas que regresaban fueron emboscadas ayer por un grupo de miseriya. Emboscaron 10 autobuses y siete remolques cargados con las pertenencias de esas IDP (personas desplazadas internamente, por sus siglas en inglés) que venían del norte", dijo el ministro de Asuntos Internos del sur, Gier Chouang Aloung, el martes a periodistas.
Aloung dijo que el ataque había ocurrido en el lado norte de la frontera, entre el estado de Kordofán del Sur, en el norte, y de Bahr al Ghazal del Norte, en el sur, y que las autoridades le habían dicho que 10 personas murieron en el ataque.
"Los 10 sudaneses podrían haber votado (...) Esos ataques no son en Sudán del Sur. Son en Sudán del Norte. Los miseriya no son una tribu extranjera. Está en Sudán (...) así que el norte es responsable".
Mohamed Wad Abuk, un miembro destacado de los nómadas árabes miseriya de la zona, negó cualquier implicación en el ataque.
"Es una mentira y los miseriya no han atacado ningún convoy. El SPLM sólo quiere explotar la situación en la zona para crear confusión", dijo, refiriéndose al partido dominante en el sur, el Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán.
Este último ataque ocurre después de cuatro días de enfrentamientos confirmados entre los nómadas y la policía del sur y jóvenes en la disputada región fronteriza de Abyei, un punto de conflicto de las tensiones entre el norte y el sur en el pasado.
Miles de personas acudieron a votar en el tercer día de referéndum en el sur, una región sin desarrollar con 60 kilómetros de carreteras asfaltadas, la segunda mayor tasa de mortalidad materna del mundo y una de las peores en escolarización en primaria.
"Está avanzando muy, muy fácilmente. No parece que haya miedo a no alcanzar el límite del 60 por ciento. De hecho. pensamos que habrá mucho más que eso", dijo el presidente de la comisión organizadora del referéndum, Mohamed Ibrahim Jalil.
Jalil, un abogado del norte con base en Jartum, dijo a Reuters que los centros electorales ya habían recibido entre un cuarto y la mitad de los votantes registrados en sus distritos en los primeros dos días de la votación, que durará una semana.
El referéndum era una promesa incluida en el acuerdo de paz de 2005 que puso fin a la guerra civil más larga de África, entre el norte, principalmente musulmán, y el sur, donde la mayoría profesan el cristianismo y las creencias tradicionales.
Según las normas, la consulta necesita un 60 por ciento de participación para ser válida. Más del 50 por ciento de los votantes tendrían que elegir la independencia del sur para separarse, lo que se considera el resultado más probable.
Los resultados finales están previstos para antes del 15 de febrero, y las cifras preliminares podrían conocerse dos semanas antes. Unos 4 millones de personas se registraron para votar en el sur y en las comunidades de desplazados que se encuentran en el norte y en el extranjero.