Los equipos de rescate buscan hoy a 78 personas desaparecidas en las riadas en Queensland, en el noreste de Australia, donde hay diez muertos y 200.000 damnificados, y tres cuartas partes del Estado han sido declaradas zona catastrófica.
Los temores se han cumplido en Australia y el río Brisbane se ha desbordado finalmente a su paso por la tercera mayor ciudad del país, donde miles de ciudadanos intentan salir de los barrios bajos para escapar de las riadas, que han causado ocho muertos y más de setenta desaparecidos.
Parte del centro y algunos distritos de Brisbane ya han sido desalojados, y otros vecinos se desplazan de pie a zonas más altas, han informado los servicios de emergencia. Sin embargo, en las áreas altas sigue funcionando el transporte público.
"El número de muertos aumentará"
La primera ministra australiana, Julia Gillard, ha comparecido en televisión para afirmar que "la nación tiene que prepararse para el hecho de que el número de muertos por las riadas aumentará".
Mientras tanto, los servicios de emergencia australianos siguen buscando a al menos 72 personas desaparecidas tras las trombas de agua que anoche pasaron por Toowoomba, una zona del noreste del país afectada por graves inundaciones.