
La plataforma petrolera situada en el Golfo de México en la que hubo una explosión el martes y estaba en llamas, se ha hundido este jueves, según ha informado la Guardia Costera estadounidense.
El accidente se produjo durante la noche del martes frente a la costa de Luisiana, a unos 75 kilómetros de la localidad de Venice, y la Guardia Costera sigue buscando a 11 de los 126 trabajadores que estaban en la plataforma en el momento de la explosión.
Guy Cantwell, portavoz de Transocean, ha asegurado que la compañía ha visto fotos del lugar que muestran que la plataforma "no está ahí" y ha agregado que no tenía más detalles y que no podía confirmar que el fuego se había extinguido.
La explosión causó una enorme columna de fuego y humo que los servicios de emergencia todavía no habían conseguido apagar.
La plataforma estaba derramando 42.000 litros de petróleo pero el fuego y el humo impedía a los servicios de emergencia enviar los equipos necesarios para taponar el escape.
Gran riesgo de vertido
Ahora que la plataforma se ha hundido y se ha extinguido el fuego los equipos tratan de contener el petróleo derramado.
Según la Guardia Costera, de los 126 empleados que trabajaban en la plataforma, y aparte de los 11 dados por desaparecidos, 98 fueron llevados a tierra en buenas condiciones y el resto fueron tratados por heridas de diferente gravedad en centros hospitalarios.
El motivo de la explosión todavía se desconoce y esta siendo investigado.
La plataforma Deepwater Horizon, que pertenece a la empresa con sede en Suiza Transocean Ltd y extraía petróleo para la British Petroleum (BP) fue construída en 2001 y su reemplazo costaría más de 600 millones de dólares, según estiman los analistas.
Deepwater Horizon tenía una superficie de 132 metros de largo por 85 de ancho y puede operar en aguas de 2.500 metros y perforar a una profundidad de más de ocho kilómetros.