La próxima final de la Copa del Rey, que se disputará en el mes de mayo entre Barcelona y Athletic de Bilbao, tiene visos de comenzar con una notable polémica, toda vez que los entornos de ambos clubes barruntan ya la previsible protesta contra el himno español y el Rey Felipe VI.
Esta reivindicación no es algo nuevo. Ya en los últimos años, según han ido creciendo las demandas soberanistas en Cataluña, las presencias del FC Barcelona en dicho encuentro han ido siempre acompañadas de problemas en las gradas.
Así fue el año pasado, en el encuentro que enfrentó al conjunto culé con el Real Madrid en Mestalla, recordado por el gol de Gareth Bale que decantó el marcador. Antes del mismo, la afición azulgrana decidió protestar con la ya tradicional pitada al himno (vea aquí las imágenes).
Si un año antes no se había dado este extremo, al disputar la final Real Madrid y Atlético, si nos remontamos a 2012 sí encontramos un nuevo episodio controvertido. En aquel año, la final era la misma que en el presente: Athletic-Barcelona. Entonces, con el ambiente más caldeado que nunca, el entonces Príncipe Felipe presidía el encuentro debido a la delicada salud de su padre, el entonces Rey Juan Carlos I. La protesta aún resuena en los oídos de muchos. Probablemente fue la mayor de las vividas en la historia del fútbol español (vea aquí el vídeo). E incluso, generó una notable polémica debido a que TVE trató de silenciarla en la transmisión televisiva.
También en 2011, en el 'Clásico' disputado en Mestalla, hubo silbidos a la Marcha Real, que fueron más acentuados si cabe en la edición de 2009. También en el mismo escenario y con los dos equipos que han llegado en 2015 al partido por el título. Entonces, con los Reyes Juan Carlos y Sofía presentes. Y aquella también se recuerda todavía (vea aquí la pitada).
De este modo, todo hace prever que en la presente edición volverá a darse una protesta antes del partido, en lo que ya se ha convertido en las últimas temporadas en una suerte de 'clásico' en el fútbol nacional.
Así planean la protesta