
El defensa del Barcelona Dani Alves pidió perdón después de su momento de ira al ser sustituido en el Manchester City-Barcelona, en el que reventó una botella de agua de un golpe.
En un texto publicado en sus redes sociales, Alves lamentó lo ocurrido en el Etihad. "Si me equivoco como ayer pido perdón, sobretodo a la gente que pude causar algún prejuicio o en ese caso que acabe mojando", reza lo escrito por el futbolista, haciendo gala de su humor habitual.
El brasileño aseguró que no permitirá "que nadie ensucie mi paso por ese club, ni por este equipo por lo sucedido, o por nadie que pueda suceder", al mismo tiempo que deja claro su actitud de dar siempre la cara. "Yo siempre soy responsables de mis actitudes, sean ellas buenas o no tan buenas, siento esa profesión como alguien que ama lo que hace y que la defiende como la siente", afirmó.