El futuro de Iker Casillas en el Real Madrid vuelve a ser una incógnita. Lo es porque él mismo no sabe qué será de él cuando acabe el curso. Según revela este miércoles el diario As, el portero pese a sus declaraciones de que desea quedarse en la capital, tiene dudas. Muchas dudas. Dudas que se han acrecentado en los últimos días tras los pitos del Bernabéu y que tienen como única respuesta conocida la de su posible destino. El capitán no se marchará a otro equipo europeo sino que pondrá rumbo a EEUU.
Insiste el rotativo madrileño en que, en todo caso, esas dudas, sean para decantar la balanza a un lado, sea para decantarlo en el otro, se resolverán sólo cuando llegue el mes de junio.
Es decir, que al contrario que en temporadas anteriores, no tratará de decidir nada antes de que se resuelva los campeonatos en marcha. Y es que Casillas tenía claro a principios de 2014 que se iría al Arsenal.
Así se filtró y así se supo en la prensa. Él mismo admitió que había pensado en marcharse, pero que una reunió con Florentino Pérez frenó. Ese cambio de opinión hizo que recibiera críticas por indeciso. En esta ocasión no se repetirá ese panorama.
Mientras, miembros de su entorno le han animado a salir del club para evitar 'humillaciones' como la que sufrió ante el Depor, cuando el Bernabéu (o un sector del Bernabéu) le pitó por su actuación en el derbi. En todo caso, Casillas tendrá en cuenta en su decisión final la Eurocopa de 2016.
Iker quiere llegar a este torneo para poner punto y final a su carrera en 'La Roja', algo que parece complicado si se marcha a EEUU, pero que es todavía posible si se mantiene en Madrid o acaba en algún otro club europeo de peso.
Entidades
Su entorno le empuja