El presidente del Barça, Josep María Bartomeu, se defendió anoche de su imputación por el caso Neymar. Bartomeu elaboró un discurso en el que afirmó que "hay poderes del Estado a los que no les ha gustado que Neymar esté en el Barça o que hayamos colaborado en el proceso del país". Sus palabras han sido vitoreadas por ciertos sectores del barcelonismo, pero también criticadas por otros que no entienden que se abracen estas teorías cuando existen datos que apuntan a una dirección contraria.
Cabe recordar que el juez Pablo Ruz, instructor de esta causa, aceptó la petición del fiscal de imputar al mandatario tras advertir indicios de que el pudiera haber facilitado la evasión de 2'8 millones de euros en la contratación de Neymar.
En este sentido, tres fueron las contradicciones en las que entró Bartomeu a la hora de explicar el porqué de esta imputación.
1.- La denuncia fue catalana
La primera de las contradicciones en las que incurrió Bartomeu radica en la esencia misma de su teoría. Según el presidente, el origen de este caso nace en el no-fichaje de Neymar por el Real Madrid y su llegada al FC Barcelona. De sus palabras se sugiere la presencia de una mano 'blanca' que habría forzado la actuación de los poderes públicos para acosar al Barça y a sus mandatarios.
La realidad, sin embargo, dice que el origen de todo este terremoto está en Cataluña y más en concreto, en la localidad de Olesa de Montserrat. Allí vive Jordi Cases, el farmacéutico socio culé que presentó denuncia por supuesta apropiación indebida de 40 millones de euros ante Rosell. Más tarde, amplió la denuncia a Bartomeu y Faus (vicepresidente económico).
Cases, pidió información al club sobre las informaciones que señalaban que el Barça había pagado 40 millones de euros directamente al jugador por verle de blaugrana. La negativa del club forzó su denuncia. Tiempo después, Cases la retiró porque, según su versión, ya había recibido la información que necesitaba.
El problema es que la justicia y Hacienda decidieron seguir investigando tomando como punto de partida las sospechas que había extendido Cases y que ahora toman forma de presunto delito por evasión fiscal.
2.- Un Barça poco 'independentista'
Afirma Bartomeu que la Justicia ha actuado contra el Barça por la implicación del club en actos de carácter independentista como el llamado concierto por la libertad, la cadena por la independencia de la Diada de 2013 o lucir la señera por la Diada de 2014.
Sin embargo, la realidad dice que este Barça es uno de los que menos tendencia 'independentista' ha mostrado en los últimos tiempos. Con Joan Laporta al frente, el club se manifestaba abiertamente como una entidad que debía ejercer influencia pública para lograr que Cataluña fuera una nación independiente. Sin embargo, y pese a ello, durante su gestión al frente del palco blaugrana no estuvo nunca salpicada de este tipo de acciones extradeportivas.
De hecho, asociaciones vinculadas con el proceso soberanista catalán han criticado en más de una ocasión el hecho de que el Barça, como institución, no se haya 'mojado' abiertamente en el proceso y hayan tenido que ser otras figuras vinculadas al barcelonismo como Guardiola las que hayan liderado la voz del deporte en este proceso.
3.- Procesos abiertos contra madridistas
Cabe recordar que las pesquisas por el caso Neymar no son las únicas abiertas contra futbolistas y entidades de élite por supuesto impago de impuestos. Hombres como Iker Casillas o Xabi Alonso (además de Piqué, Villa, Sergio Ramos o Messi) han sufrido inspecciones fiscales tras las cuales algunos de ellos han decidido abonar 'motu propio' elevadas cantidades (cerca de dos millones en el caso del capitán del Real Madrid) para zanjar sus problemas con el fisco.
Esto es, la presión de Hacienda contra deportistas de élite no se limitan sólo a jugadores del Barça, sino también a otros futbolistas sin ningún vínculo con los blaugrana.
A este respecto, recientemente se ha sabido que Piqué se ha negado a pagar los 2'45 millones que también le reclama la Agencia Tributaria.
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Presión a madridistas