
La reciente muerte de un miembro del grupo ultra 'Riazor Blues' a manos de miembros del 'Frente Atlético' en Madrid ha vuelto a poner en primera plana la relación que tienen los clubes con los ultras y de qué manera les apoyan y alientan para que realicen sus actividades delictivas. Según Antonio Salas, pseudonimo del famoso periodista que se infiltró entre varios grupos ultras y que publicó sus vivencias en el libro 'Diario de un Skin', apunta a cuatro razones que explican el apoyo que dan los equipos españoles a sus grupos radicales.
"Este vínculo entiendes cuando estás con ellos dentro de las gradas y vives el ambiente que hay antes y después de los partidos. Entonces llegué a la conclusión de que hay cuatro factores para explicar esta unión entre clubes y radicales", explicó en una entrevista en la Cadena Cope.
1.- Apoyo en las elecciones
"Muchos de los miembros de las peñas ultras son socios de estos clubes. En 2002 yo tenía el carné número 1.016 de Ultra Sur, es decir, que había mínimo 1.000 miembros de esta peña. Son muchos. Y muchos miembros de esos ultras son también socios, ergo, posibles votantes en las elecciones presidenciales de estos clubes. Está documentado que los votos de los ultras eran recogidos por los líderes de estos grupos para favorecer a determinados candidatos", comenta Salas.
2.- El apoyo en el campo
"Yo he salido afónico del estadio, literalmente, después de estar cantando sin parar durante 90 minutos de un partido, realizando esas coreografías de animación que tanto gustan a los jugadores y que sobre todo agradecen cuando se juega fuera de casa y nadie les anima. Nadie anima más que los ultras", añade.
3.- El dinero
"Hay también un factor económico. Nadie gasta tanto dinero en el merchandising de los clubs, en sus rifas, en los bares de los campos, etc, como los ultras. Por lo tanto, es comprensible que a las directivas les cueste renunciar a ese apoyo económico", continuó Salas.
4.- El miedo
"El cuarto factor es el miedo. Se ha dado el caso de jugadores de Primera División que han sido agredidos por Ultras de sus hinchadas por haberles hecho un feo, por no apoyar alguna de sus iniciativas... Y tenemos como ejemplo el reciente episodio de hace unas cuantas temporadas, cuando un grupo del Frente Atlético interrumpió un entrenamiento del Atlético vestidos con pasamontañas para hablar con los capitanes y exigirles más esfuerzo en el campo", concluyó Salas su análisis.