
Luka Modric, mediocampista croata del Real Madrid, podría estar tres meses fuera de los terrenos de juego debido a un arrancamiento del tendón proximal del recto femoral izquierdo. Esta ausencia forzará a Carlo Ancelotti, a buscar una solución a medio plazo con la que tapar su vacante, mantener el buen juego merengue y, sobre todo, conseguir buenos resultados. El italiano maneja, por ahora, tres opciones previsibles y una sorpresa con la que solventar esta situación.
Todas pasan por mantener el 4-3-3. La presencia del recuperado Bale hace que sea más fácil usar la BBC (Bale, Cristiano, Benzema) en ataque. Así pues, lo único que habría que 'tocar' es el mediocampo. El plan más ofensivo sería la inclusión de Isco en lugar de Modric.
Es cierto que el croata está más habituado a jugar de organizador que el español, pero no menos cierto es que éste ya ha ejercido en este puesto en partidos importantes como la final de la Champions de Lisboa, donde entró en sustitución de Khedira.
Además, Ancelotti ya ha comentado en alguna ocasión que más que ver a Isco de falso '9', lo ve en la zona de creación. Quizá la baja de Modric le dé una oportunidad para hacerlo con cierta regularidad.
Los otros dos planes del Real Madrid pasan por la presencia de Khedira o Illarra en lugar de Modric. El priemero podría jugar directamente como interior. Es ahí donde le ha usado 'Carletto' en partidos anteriores de la presente temporada.
Parece que el preparador ex del PSG o Milan entre otros no le quiere como pivote sólo por delante de la defensa. Sólo la opción de un doble mediocentro le permitiría ponerle en la medular, pero este esquema obligaría a retrasar a Bale a la zona del interior derecho.
El plan C es incluir a Illarra, pero no en el lugar donde juega Modric, sino por delante de la defensa. Kroos dejaría este lugar para marcharse al puesto de interior, donde ya jugó algún choque antes de que Xabi Alonso se fuera al Bayern.
¿Y el plan sorpresa?
La opción más extraña pero nada descartable sería la presencia de Marcelo como interior izquierdo incluso con un 4-3-3. El brasileño ya ha jugado como medio pegado a la cal en partidos en los que el Real Madrid ha usado el 4-4-2. Sucedió en el Clásico, en Granada o ante el Cornellá.
El problema es que el brasileño jamás ha ocupado este puesto cuando el Real Madrid ha probado con un 4-3-3. Sea como fuere, la recuperación de Coentrao invita a pensar que el italiano podría usar esta alternativa en algún momento de algún partido. Por ahora, que lo haga desde el principio, suena a quimera.