Iker Casillas y Sergio Busquets se han negado esta mañana a responder preguntas vinculadas con posibles irregularidades o anomalías fiscales vinculadas a sus ingresos.
Estas preguntas han llegado provocadas por una información del diario El País. El rotativo afirma, al igual que lo hizo en su día El Mundo, que Hacienda está estudiando e investigando a varios jugadores de alto nivel por supuestas prácticas irregulares vinculadas con la gestión de sus derechos de imagen.
Cuando un redactor del diario As les ha cuestionado sobre esta situación, la jefa de prensa de la Selección, Paloma Antoranz, ha tratado de frenar la duda.
El periodista ha insistido y Casillas ha zanjado el asunto con un "no es un tema deportivo" ante el que el profesional del medio no se ha rendido. Ha sido ahí cuando ha surgido un profundo silencio entre ambos que, según los presentes, ha sido bastante tenso.
Cabe recordar que la relación entre As y los capitanes de la selección (en especial Sergio Ramos) se ha torcido en los últimos días después de que el periódico madrileño haya acusado al defensa de no haber estado cómodo con la ausencia de Costa en el combinado nacional.
"Un periódico [por el As] sacó en portada que yo me desdije y no es así. Me reitero en todo lo que comenté. Quizá les molestó que mis palabras las pronunciara en la competencia", comentó Ramos el sábado en referencia a su entrevista en Radio Marca.
Hacienda se pone dura
Hacienda lleva tiempo (algo más que un año) investigando a jugadores de élite por un supuesto uso irregular de sus derechos de imagen. Desde 1996, los jugadores puede cobrar hasta un 15% de sus salarios en concepto de derechos. Estos ingresos no tributan como rendimiento del trabajo, ergo, no pagan IRPF, sino impuestos de menor cuantía.
Una práctica que provoca, según el fisco, que los gestores de los jugadores creen empresas pantallas a las que ceden estos derechos de imagen para, más tarde, acabar ingresando esas cantidades con su correspondiente reducción tributaria.
Aunque esta práctica estaba mayoritariamente permitida, Hacienda entiende que viola el espíritu de la norma. Por eso está investigando a los jugadores. Quiere que pasen por caja sin llevarles ante los tribunales, algo que reduciría las cantidades que pagar y el riesgo de duras sanciones para los futbolistas.
Mientras, los gestores de estos profesionales insisten en pedir que el Estado aclare y redefina la norma, toda vez que con el marco legal actual la práctica de sus futbolistas no es contraria a la norma.
Jugadores investigados