
Luka Modric, mediocampista croata del Real Madrid, será baja con su equipo entre tres y cinco semanas después de que anoche, durante el Italia-Croacia, sufriera un pinchazo en los aductores que le obligó a retirarse del encuentro. La ausencia del '19' blanco reabre de nuevo el debate sobre la medular del conjunto merengue apenas unas semanas después de que la reaparición de Bale sentara en el banquillo a Isco.
Con el malagueño en el campo, el Real Madrid había disparado su rendimiento hasta convertirse en un equipo eficaz y plástico, capaz de pasar por encima a rivales de calado como el Liverpool o el FC Barcelona. El '23' modificó el sistema merengue.
Carlo Ancelotti comenzó a jugar con un 4-4-2 en el que la posesión y el uso útil y práctico de la pelota sustituía al tradicional contragolpe y rigor físico que mandaba durante la era Mourinho.
Pese a esta notable mejoría, Ancelotti lo tuvo claro: en cuanto Bale volviera a estar listo, jugaría de inicio. Y así fue. El galés entró frente al Rayo Vallecano en el último partido de los blancos (victoria 5-1 en el Santiago Bernabéu).
Pese a lo contundente del resultado, son muchos los aficionados del Real Madrid que opinan que con Isco su equipo juega mejor. De ahí que pidieran su titularidad incluso por delante del propio Bale, fichaje estrella la temporada pasada.
Un problema que podría solucionarse temporalmente con la entrada de Isco, toda vez que el andaluz parece el más claro candidato a suplir al croata en su puesto junto a Kroos y James. Con todo, tampoco se descartan otras alternativas, como la presencia de Illarramendi o Khedira e incluso la entrada de Marcelo para dibujar variantes diferentes.