España encontró una balsa de aceite en su visita a Luxemburgo. El combinado nacional sanó en cierta parte las heridas provocadas por la sonada derrota en Eslovaquia con una 0-4 que trajo, además, la reconciliación de Diego Costa con el gol. Tras estos dos partidos, se ha podido observar una preferencia de Vicente del Bosque por cuatro futbolistas.
Koke, Busquets, Piqué y Jordi Alba han sido los únicos jugadores que han disputado los 180 minutos de los dos partidos de la fase de clasificación para la Euro 2016 de esta semana. De un total de 19 futbolistas empleados por Del Bosque, solo ellos cuatro han sido insustituibles para el seleccionador.
En concreto, llaman la atención los casos de Piqué y Busquets, con una actuación más que discreta en Zilina y en un estado de forma bastante bajo. Jordi Alba había destacado negativamente en el Barcelona por sus fallos antes el PSG, pero en Eslovaquia brindó un gran pase a Paco Alcácer para el 1-1, y ante Luxemburgo tuvo una nueva oportunidad.
Por su parte, Koke está llamado a ser uno de los herederos del centro del campo de España y en ausencia de Thiago está gozando de muchos minutos. Del Bosque quiere darle confianza, y por el momento los minutos otorgados lo están demostrando.
Esta continuidad en estos cuatro puestos (dos del centro campo y dos en la defensa) choca con los cambios en otras demarcaciones. Casillas y De Gea se repartieron los dos partidos, Juanfran dejó su puesto a Carvajal a pesar de su buen partido en Eslovaquia, Albiol y Cesc no jugaron en Luxemburgo, e Iniesta, Costa y Silva e Iniesta fueron sustituidos en alguno de los dos partidos.
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Sus cuatro 'señalados'