
El capitán del Real Madrid y la selección española, Iker Casillas, ha asegurado en una entrevista al periodista Iñaki Gabilondo que no pidió perdón a Xavi Hernández tras la reunión entre ambos a raíz de los conflictos entre los jugadores de Real Madrid y Barcelona en la sucesión de Clásicos.
"Hablé con Xavi y con Puyi y nos dijimos de todo: cosas típicas de fútbol. Aquí Casillas no pide perdón a Xavi ni se baja los pantalones, por mucho que se haya vendido. Se llama para decir que no estábamos siendo ejemplo y que iba a pasar factura. Hablamos y fue tenso, porque en la Selección nos seguíamos viendo las caras", asegura Casillas.
Sobre el hecho de que esto pudiese haber enfadado a Mou: A mí no me dijo nada. Lo que sí es cierto es que mucha gente dice que le molestó. Yo no percibí un cambio de actitud. Nuestra relación fue muy buena, porque lo que siempre le ha gustado es tener a la gente de cara. En verano de 2012 hablábamos todos los días, pero se torció en navidades".
Su situación tras la decisión de Mourinho de dejarle en el banquillo también ha sido núcleo central de esta entrevista: "Me quedé un poco aislado, no tienes convivencia, no hablas con los compañeros...lo que más preocupado me dejó fue eso, pero ahí quedó".
No obstante, tuvo palabras buenas para con el portugués: "Fue una etapa muy buena porque nos aupamos a la igualdad con el Barcelona, que la habíamos perdido. La última etapa no fue tan buena. Es una relación que no da más de sí (...) Es uno de los dos mejores entrenadores que he tenido".
"Parece que tuviese la peste"
Casillas echó la vista atrás para analizar los primeros momentos en los que le acusó de filtrar noticias negativas del vestuario pos su suplencia: "Es un poco injusto, pero entiendo que la gente empieza ese movimiento y que tienes que aceptarlo. Puede que sí lo pensase alguien del club, pero quiero pensar que ni Mourinho ni el presidente lo pensaron. Duele porque llevas aquí desde los nueve años, has conseguido grandes cosas...y aunque el público es soberano, tienes tu corazoncito y duele (...) Parecía que tuviese la peste".
No obstante, también ha reconocido que actualmente no tiene peros a la reacción de la gente de la calle cuando se encuentra con él: "Todo lo que encuentro en la calle son buenas palabras y cariño de gente del Real Madrid y fuera del Real Madrid".
Uno de los compañeros con los que se distanció tras estos incidentes fue Álvaro Arbeloa. Iker admite que la relación con él no es la de antes: "Arbeloa y yo tenemos discrepancias en cuanto a visiones en el equipo, pero eso no surge por la lesión. A día de hoy la relación es cordial y de respeto el uno por el otro. Fuera del fútbol, no es la misma que años atrás".
Además, ha asegurado que tiene una "espinita" con el Mundial de Brasil y respecto a la preparación, otro de los aspectos que se le ha cuestionado, ha dicho: "Yo no necesito ir al gimnasio, porque no me viene bien. Sí tengo otras capacidades, y para tener 33 años y hacer otros movimientos creo que estoy bastante bien".
"Pensé en irme del Real Madrid"
Todo este conglomerado de problemas hizo a Casillas pensar en marcharse del equipo de sus amores: "Pensé en irme del Real Madrid, no quieres molestar a nadie ni tener problemas ni crear mal ambiente. Lo piensas en voz baja, aunque luego en tu interior te dices, '¿por qué?'. No tuve gestiones, no hubo oferta concreta del Arsenal. Mi idea era acabar mi carrera aquí y es mi idea".
También ha analizado su última temporada, en la que consiguió ganar la décima Champions del equipo: "Siendo la temporada que menos jugué, ha sido la mejor de todas y en la que más fuerzas tuve que sacar de mi interior para reponerme. Cuando el míster me comunicó (que jugaría solo en Copa y Champions), pensé que o todo podía valer o que podía estar fuera de juego. Al final salió todo lo mejor".
Sobre su pareja, la periodista Sara Carbonero, aseguró que la relación "ha sido difícil". "A ella le vino grande al principio, y a día de hoy aún nos cuesta en el día a día. La gente se piensa que vivimos en un mundo sin preocupaciones, pero también hay un lado menos bonito, cuando quiere salir de casa y no puedes. A veces tienes que pactar por tu vida para poder disfrutar a solas de tu hijo", ha dicho Iker.
Para terminar, ha intendo definir qué significa el Real Madrid: "Es mi casa, como una propiedad. No he tenido un club que no fuese el Real Madrid, he pasado por todas las categorías y a día de hoy no entendería mi vida sin el Real Madrid. También me ha educado como persona".