Cristiano Ronaldo ha empezado la temporada con hambre de goles. No tuvo piedad frente al Elche en el partido que se disputó este martes en el Bernabéu y acabó marcando cuatro goles para engrosar su cuenta particular y colocarse como pichichi en solitario de la competición. En tan solo cuatro partidos disputados ha anotado ya nueve goles, con un promedio de 2,25 goles por encuentro y de un gol cada 40 minutos. Casi nada.
Si sigue así puede batir todos los récords habídos y por haber. Con los cuatro goles frente al Elche ha alcanzado los 186 en Liga, colocándose como tercer máximo goleador histórico del Madrid en esta competición sólo por detrás de Raúl González Blanco (228) y Alfredo Di Stéfano (216), y empatado con Santillana. Sin embargo, el luso ha logrado estas cifras en solo seis temporadas que lleva en el club, contando la presente que todavía está arrancando.
Raúl necesitó dieciséis campañas en el conjunto blanco para conseguir su abultada cifra de goles y convertirse en un ídolo del Bernabéu. Si la voracidad goleadora de Cristiano sigue tan insaciable como hasta el momento (y si tiene previsto terminar su carrera en el Real Madrid) todo parece indicar que alcanzará todos los récords fijados por sus predecesores.
De los 18 goles que ha marcado el Madrid en los tres partidos que ha jugado en la última semana (Basilea, Deportivo y Elche) Cristiano Ronaldo ha marcado ocho. Cada temporada el portugués se supera un poco más, su carácter ganador, ambicioso e inconformista no pone límites a potencial goleador. "Marcar cuatro goles en un partido es muy difícil y estoy muy contento", expresaba el crack del Madrid al finalizar el partido. Pues bien, ya lo ha conseguido en tres ocasiones. Antes había firmado cuatro tantos frente al Racing y el Sevilla.
Durante el partido frente al Elche recibió los elogios del Bernabéu que coreaba "Critiano, Balón de Oro", y tras él recibió los elogios de representantes del club y de compañeros. Butragueño instaba a los niños que quieren ser futbolistas a fijarse en Cristiano Ronaldo. En entrenador rival, Fran Escribá, hablaba en rueda de prensa con resignación por la actuación de CR7. "¿Estudiar a Cristiano? También estudiaban a Jordan y no lo paraban".
Cristiano ha cogido carrerilla y su equipo con él. El Madrid necesitaba disipar dudas con goles y para ello cuenta con un experto en hacerlos. Un hombre cuya voracidad es insaciable y que se ha puesto por objetivo batir todos los récords posibles.