
La figura de Diego Pablo Simeone sigue creciendo a pasos agigantados en el fútbol español. El técnico argentino ya se ha convertido en el mejor entrenador rojiblanco de las últimas décadas (suma cinco títulos en apenas dos años). Un palmarés que mezcla con su forma de ser. Una personalidad polémica que empieza a asemejarse a pasos agigantados a la de un viejo conocido del fútbol español. El 'Cholo' va camino de convertirse en el alumno más aventajado de José Mourinho.
Ambos comparten estrategias dentro y fuera del terreno de juego. En el primer aspecto, el de la pizarra, Simeone se ha hecho un experto en manejar sistemas defensivos que, a la contra, destrozan a sus rivales.
Así ha sido como ha ganado la Supercopa de España ante un Real Madrid dominador del esférico, pero incapaz de meter mano a su rival. Una forma de juego que, lejos de perjudicar al Atlético, le ha beneficiado. Cada robo de balón o cada fallo merengue ha sido, en este torneo, un clara ocasión de gol para el Atlético. ¿Les suena? Fue así como el Real Madrid de Mourinho consiguió desesperar al de Guardiola primero y al de Tito Vilanova después.
Quizá la diferencia entre uno y otro es que el portugués manejaba un presupuesto titánico que le permitía crear un equipo para algo más que para jugar a la contra. En el caso de Simeone, es casi lo único a lo que puede jugar un equipo que, si quiere ganar a los grandes, debe jugar como un equipo de currantes y no tanto como una escuadra de estrellas.
Pero Simeone se parece a Mourinho en algo más que en la pizarra. Su actitud ha empezado a mimetizarse con la del luso. El viernes pasado, sin ir más lejos, se marchó a la calle por protestar y acabó enzarzado con el cuarto árbitro y gritando por las gradas del Calderón, algo que solía gustar al propio Mourinho cuando también era expulsado. El portugués ocupaba siempre los asientos cercanos al banquillo para seguir con pasión las evoluciones de los suyos, tal y como lo hizo el argentino en la vuelta de la Supercopa.
Las similitudes alcanzan incluso a la forma de hablar ante los medios de comunicación. Si Mourinho era un especialista en lanzar indirectas a los rivales y también en usar mensajes victimistas contra los árbitros, Simeone no le va a la zaga.
Sus mensajes sobre Di María ("Es el mejor del Real Madrid") con los blancos en pleno proceso de venta del jugador o sus quejas por sus rojas contra los grandes ("Me expulsaron cinco veces, cuatro contra Barça y Real; algo raro debe haber") suenan muy parecidos a los discursos de los que se valía (y aún se vale) Mourinho.
Ante tanta similitud, quizá no es de extrañar que uno y otro se hayan lanzado multitud de piropos en aquellas ocasiones en las que han coincidido. "A mí me gustaba mucho el Real Madrid de Mourinho", comentó el curso pasado Simeone en la previa de las semis de la Champions, cuando se vio las caras con el Chelsea de 'The Special One'.
"Simeone está haciendo un trabajo fantástico. Me encanta", le replicó el luso, sabedor de que el 'Cholo' ha usado algunas de sus tácticas defensivas para hacer a su Atlético campeón de títulos que parecían inalcanzables para los del Manzanares.