
Con Luis Enrique a la vuelta de la esquina, nadie tiene dudas respecto al futuro del 'Tata' Martino: no seguirá en el Barcelona la próxima temporada. Una decisión que se explica por los resultados deportivos y por la necesidad de una renovación, pero también por una serie de factores internos.
Uno de ellos llama poderosamente la atención. Tal y como publica El País, los métodos del entrenador argentino en Can Barça han estado cava vez más bajo sospecha a medida que transcurría la temporada. La principal queja sobre su forma de trabajar es que se compone de métodos anticuados. La culpabilidad se extendería también al resto de colaboradores del 'Tata'.
Tal ha sido el hartazgo por parte de los jugadores que, en mitad de un mini partido de cuatro jugadores contra cuatro, uno de los futbolistas más veteranos habría parado el ejercicio para encararse con Elvio Paolorosso, ayudante del 'Tata': "¿No ve que esto es una vergüenza? Con esta intensidad no vamos a ningún sitio".
Este peso pesado del vestuario blaugrana reclamaba precisamente lo que le ha faltado al equipo en muchos partidos. Una intensidad que le ha costado puntos al Barcelona. Partidos como el de Elche, el de Valladolid, el de Granada, el del Getafe en casa...que podrían suponer una liga.
Desde el Barcelona, pese a apreciar la diplomacia y el buen talante de Martino, se considera que el argentino no ha sabido o no ha querido involucrarse en el aprendizaje de estas nuevas técnicas que el vestuario ha echado en falta. Los colaboradores que el club les puso a su disposición elaboraron informes e informes que después no se leían, y los preparadores físicos también consideran que sus consejos han sido ignorados.
En definitiva, un conjunto de desencuentros que a la larga han erosionado la confianza que la plantilla y la institución había depositado en el argentino. Motivos más que suficientes para una directiva que a falta de la 'final' de Liga por disputar, quiere dar el carpetazo a una temporada para el olvido.