MUNDIAL-Ribéry hace retroceder el reloj de cara al Mundial de Brasil

PARIS, 6 may (Reuters) - El francés Franck Ribéry, atormentado en el último Mundial y contenido hace dos años en la Eurocopa, ha vuelto a colocarse entre los mejores de Europa y se muestra como un personaje despreocupado que ama jugar al fútbol.

El delantero del Bayern de Múnich saltó al estrellato en el Mundial 2006 donde, bajo la guía de Zinedine Zidane, fue una bocanada de aire fresco en una selección francesa entrada en años. Ribery supo brillar y anotó un gol impresionante contra España en los octavos de final de aquel torneo.

Ribéery, que tiene una cicatriz en la cara tras un accidente de coche con sus padres cuando tenía dos años, entró en el último momento en la plantilla del entonces entrenador Raymond Domenech y se ganó rápidamente los elogios de Zidane, que lo definió como la "joya del fútbol francés".

Sin embargo, esa joya era un diamante en bruto y tardó varios años en empezar a brillar y ser un producto acabado, algo que Ribery logró mientras se prepara para su tercer Mundial.

Ribery se ha convertido en un jugador de clase mundial en el Bayern desde 2006 y parece haber dejado atrás el lado oscuro que ocasionó serios daños a su carrera profesional.

El año 2010 fue sin dudas su peor año, cuando poco antes del Mundial fue interrogado como parte de una investigación por una red de prostitución en París.

Después del torneo, Ribery y otros jugadores fueron acusados de haber tenido sexo con una prostituta menor de edad, cargos de los que finalmente se liberaron en enero de este año.

El escándalo, sin embargo, hizo que Ribery entrara con el pie izquierdo en un Mundial que también se vio oscurecido por la infame huelga de los jugadores de Francia y que no hizo mucho por ayudar a reparar la dañada imagen del centrocampista.

Ribery estuvo al frente del motín de la plantilla e irrumpió en el principal programa de la televisión francesa.

"Desde la Eurocopa 2008 he sufrido en este equipo de Francia, cada vez que me sumo a la plantilla hay problemas", dijo Ribery, mientras defendía al delantero Nicolas Anelka, que había sido expulsado del equipo por insultar a Domenech.

En su regreso al Stade de France tras una sanción de tres partidos, Ribery fue abucheado, aunque parte del público coreó su nombre, lo que indicó que los hinchas estaban enfrentados por su vuelta.

En la Eurocopa 2012, Ribery fue el mejor en un equipo medio, pero justo cuando Didier Deschamps se convirtió en entrenador en lugar de Laurent Blanc el talentoso jugador recuperó la actitud despreocupada del hombre que alguna vez lanzó un cubo de agua al histórico portero del Bayern Oliver Kahn por diversión.

"A veces tengo la despreocupación que tuve en 2006. Algo cambió con Deschamps", admitió Ribery al diario Le Figaro el año pasado.

La actitud de Ribery dentro y fuera del campo es el mejor ejemplo de cómo se siente, y el atacante, que dice que disfruta de una gran relación con el técnico del Bayern Josep Guardiola, fue clave para que el club ganara un triplete - Bundesliga, Copa de Alemania y Liga de Campeones - la temporada pasada.

Ribery fue elegido por la UEFA como el mejor jugador de Europa en 2013, aunque no le llegó para ganar el Balón de Oro de la FIFA que reconoce al mejor futbolista del mundo, una decepción que rápidamente dejó atrás tras haber sido tercero por detrás de Cristiano Ronaldo y Lionel Messi.

Una actuación de alto nivel en el Mundial de Brasil podría ayudarle a obtener ese premio este año, ya que no quedan dudas de que ha alcanzado su máximo potencial y que es uno de los mejores del mundo.

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