Leo Messi tiene un problema. El problema es que, hasta ahora, casi nadie lo había reconocido. Y aún hoy parece que cuesta hacerlo.
Los vómitos de la estrella argentina el pasado miércoles en pleno césped, durante el Rumanía - Argentina, dispararon las alertas. No es la primera vez que le sucede. Ése es el problema.
Y es que al 10 ya se la ha visto más de una vez dejando sus fluidos sobre el verde de muchos estadios. Una tendencia que comenzó hace unos años, pero que esta temporada ya ha provocado más de una mirada indiscreta por parte de las mil y una cámaras que le enfocan.
¿Hay algún tipo de inconveniente médico serio que afecte a la Pulga?
La duda se la plantearon al propio Leo Messi cuando acabó el partido en Bucarest. "No, me pasa frecuentemente", dijo 'La Pulga' tratando de restar importancia a lo sucedido.
Sin embargo, sus palabras pasaron a ser ignoradas por buena parte de una opinión pública deportiva convulsionada ante lo sucedido. Poco a poco, según las dudas crecían, empezó a crecer la presión para que se dijera más al respecto.
Y hoy, tanto Messi como su técnico, Gerardo, 'el Tata' Martino, lo han hecho. Y no precisamente para calmar a los aficionados culés y argentinos.
El primero, el propio protagonista, ha hablado en una entrevista para una televisión argentina en la que, como se puede ver en el vídeo adjunto, ha confirmado que los vómitos no sólo le suceden en el terreno de juego, sino también en otras partes.
"Me pasa de seguido, cuando estoy en los partidos, en las prácticas [por los entrenamientos], cuando estoy en casa... No sé bien qué es. Hice miles de estudios y nada, me pasa. Cuando me ocurre me cojo una pastilla y nada. Me sucede a veces antes o después de los partidos y cuando lo tengo, me entran arcadas, hasta que casi vomito y entonces termina", comentó el argentino confirmando que lo este tipo de episodios se han terminado convirtiendo en una suerte de rutina para Messi y su rendimiento deportivo.
Entre tanto, Martino ratificó la versión de su estrella al tiempo que le añadió un escalón más de preocupación al afirmar que, al contrario que la opinión que había vertido el club en las últimas horas, lo que le sucede a Messi "no es normal".
"No lo ha podido solucionar, pero no le alarma porque le pasa habitualmente y no le afecta en absoluto en su trabajo, aunque no es normal", añadió el técnico.
Sea como fuere, lo que parece claro es que Messi sufre de algún tipo de dolencia que le provoca vómitos que no controla y que, en todo caso, parecen no estar directamente provocados por sus esfuerzos sobre el terreno de juego, algo que en un primer momento se entendía como la causa de esas arcadas y episodios desagradables.