El futuro de Dani Alves en el FC Barcelona empieza a estar en el aire. El futbolista brasileño termina su contrato el 30 de junio de 2015, esto es, le queda todavía año y medio de contrato para dejar la disciplina culé.
Él parece querer presionar al club para ampliar su vínculo con la entidad, pero los planes blaugranas parecen que van encaminados por otro lado. Sus esfuerzos se centrarán en retener a Montoya (termina contrato el próximo año) y en fichar a un sustituto de Alves que ya podría tener nombres y apellidos: Camilo Zúñiga.
El diario Sport filtra en su portada este viernes que el lateral colombiano del Nápoles es el preferido del Barça para suplir al brasileño.
Con 27 años camino de 28, el zaguero finaliza su vinculación con la entidad italiana en 2018, pero habría incluido una cláusula en su contrato por la que quedaría libre por 15 millones de euros si un grande de Europa llama a su puerta, un precio moderadamenta asequible para un jugador de sus características.
Preferencia por la cantera
Más allá de cualquier posible incorporación, el Barça quiere atar cuanto antes a Montoya. Y es que el canterano (al igual que Bartra) acaba contrato el próximo mes de junio, lo que hace que pueda negociar libremente desde el mes de enero con el equipo que quiera para marcharse gratis a final de campaña.
Montoya, disgustado por su papel secundario en los últimos partidos, tiene dudas de si renovar o no ante los planes que prevé en el Barça. Una desconfianza que el club podría borrar con sus planes de futuro para Alves.
Dudas para la renovación
Alves ya ha planteado al Barça sus intenciones. Le encantaría renovar, pero no lo quiere hacer a cualquier precio. Mientras que en el club no tiene pensado pagarle más dinero de lo que actualmente percibe, el brasileño pretende aumentar un poco sus emolumentos ante las subidas que también han tenido pesos pesados como Puyol, Busquets, Xavi, Messi o la que se prevé en breve de Iniesta.
En realidad, la intención blaugrana está más próxima a no concederle sus deseos y venderle el próximo mes de junio para sacar tajada antes de que pueda quedar libre para negociar con quien quiera.
Con 30 años a sus espaldas, lo que parece complicado es que Dani Alves vaya a seguir mucho más tiempo en una entidad que, en realidad, ya quiso venderlo el verano pasado.
En 2012 la entidad blaugrana lo colocó en el mercado tras algún roce con Guardiola, pero las únicas ofertas interesantes que llamaron a su puerta no le interesaron a él, toda vez que eran los pretrodólares rusos (Anzhi y Zenit de San Petersburgo) los únicos con potencial suficiente para pagar los 24 millones de euros que reclamaba de media la entidad culé.
Así pues, Alves se quedó y comenzó siendo suplente de la mano de Tito Vilanova. Montoya lo adelantó hasta que el canterano sufrió problemas que dieron a Alves ventaja suficiente como para ganarse el puesto. Sin embargo, Alves seguía lejos de su mejor forma, con partidos improductivos, como el 2-0 del Milan en Champions, en octavos de final.
Ya al final de curso, el lateral recuperó su tono, sobre todo ofensivo, y acabó ganándose el puesto. Este año Tata Martino confía en él con fe ciega. Es el titular titular muy destacado por delante del propio Montoya.
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