Gareth Bale podría tener las horas contadas como jugador del Tottenham. Los 'spurs' han hecho oficial esta tarde la contratación del argentino Erik Lamela, procedente de la Roma, lo que posibilitaría la llegada del galés al Real Madrid acabando con un sinfín de rumores durante el mercado veraniego de fichajes.
El fichaje de un jugador para cubrir la hipotética baja de Bale habría sido una de las condiciones impuestas por el club londinense para facilitar su salida del club. Por lo tanto, la llegada de Lamela a White Hart Line podría propiciar el inminente traspaso de Bale.
El fichaje del galés se encuentra en la fase final, y está pendiente de las últimas negociaciones entre clubes. El descontento del club londinense con el comportamiento del jugador y la tendencia de Daniel Levy, el presidente del Tottenham, a alargar hasta el último momento las conversaciones han contribuido a un desenlace tardío, pero el futuro de Bale es más blanco que nunca.
Ljajic, a la Roma
En el baile de atacantes que ha provocado el fichaje de Lamela, la Roma ha cubierto la baja del argentino con la incorporación del centrocampista serbio de la Fiorentina Adam Ljajic, pretendido entre otros equipos por el Milan y el Atlético de Madrid.
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Bale sigue en rebeldía