
Cada temporada el Madrid suele protagonizar el culebrón del verano con algún fichaje. Muchos jugadores se han visto envueltos el líos de negociaciones, ofertas y rebeldías cuando Florentino llama a su puerta atraídos por la idea de poder jugar en el Bernabéu. Este año es el caso de Bale, pero antes ha habido otros que en muchas ocasiones no han acabado con un final feliz. ¿Puede pasar lo mismo con el galés?
El poder de atracción del Madrid no siempre es una baza positiva para los fichajes del club porque a veces los jugadores se precipitan a la hora de declarar su intención de marcharse de sus respectivos equipos antes de que los clubes lleguen a un acuerdo para el traspaso. Seguramente habrá muchos episodios en los que ha pasado esto pero estos son los cuatro más recientes.
El caso Agüero
Le pasó a Agüero cuando estando en el Atlético de Madrid escuchó que el vecino de la ciudad estaba interesado en hacerse con sus servicios. El futbolista argentino estaba en la órbita de muchos grandes clubes pero él quería ir al Madrid aunque no lo confesó abiertamente. "Me quiero ir y me quiero ir", fue lo único que dijo. Con eso se ganó antipatía de los aficionados rojiblancos que llegaron incluso a quemar su camiseta. Lo que no sabía Agüero es que entre el Madrid y el Atleti existía un pacto no escrito de no agresión y su fichaje por los blancos iba ser harto complicado. Sin vuelta atrás, tuvo que marcharse al City aunque en un principio no había barajado esa opción.
Interés por Silva
Otro que acabó en el conjunto inglés tras los rumores de su fichaje por el Madrid fue David Silva. El canario era del agrado tanto del presidente como de la afición que quería a uno de los campeones del mundo. El Valencia había vendido a Villa al Barça pero necesitaba deshacerse de otra de sus estrellas para hacer frente a su deuda y el conjunto blanco era un destino que le gustaba al jugador. Ambos clubes no llegaron a un acuerdo y Silva partió rumbo a la Premier.
Llorente y el Athletic
Algo parecido pasó con Fernando Llorente hace dos veranos. Como casi todos los años, el Madrid buscaba reforzar su delantera pero esta vez con producto nacional. Llorente era el mejor colocado pero al final declinaron contratarle para evitar problemas con el Athletic. Llorente también había expresado, como Agüero, que tenía intención de abandonar el club pero las ofertas que llegaron no se aceptaron. En este caso, el final no fue bueno ni para el jugador, que no terminó vistiendo de blanco y pasando una temporada entera en el banquillo, ni para su equipo, que perdió la oportunidad de hacer caja con él tras haberse cumplido su contrato.
La disyuntiva de Neymar
Incluso Neymar ha acabado en el eterno rival después de que el Madrid mostrara en repetidas ocasiones su interés por contratarle. No es el mismo caso que los anteriores porque el brasileño sí que terminó donde quería desde el principio pero está claro que Florentino se entrometió en su fichaje por el Barça haciendo una oferta al Santos que por momentos hizo dudar al jugador.
Está por ver cómo acaba el culebrón de Bale en el que se repiten los mismo pasos que en los anteriores. El Madrid ha llamado a su puerta y el galés está haciendo todo lo posible por tensar la cuerda con el Tottenham para que acepten la oferta del Madrid y le dejen jugar en el Bernabéu. Quien sabe si acabará siendo así o si, por el contrario, termina vistiendo la camiseta de otro equipo.