Llegó en junio de 2009 y, tras cuatro temporadas en el Real Madrid, las lesiones y la falta de ritmo no han dejado volver a ver al Balón de Oro que deslumbró en el Milan. El club ha renovado su confianza en él verano tras verano con la esperanza de que éste respondiera a base de buen juego... Pero la paciencia con Kaká ha llegado ya a su límite.
El madridismo aguardaba la llegada de Carlo Ancelotti con incertidumbre al respecto de qué haría con el caso de Kaká. El entrenador italiano fue quien le convirtió en el crack que ilusionó a la afición a su llegada a Madrid y se especulaba con que la buena relación entre ambos llevara a Carletto a luchar por una segunda juventud para el futbolista brasileño. Pero ni siquiera Ancelotti parece estar ya dispuesto a perder el tiempo.
No hay sitio para Kaká...
Ayer en rueda de prensa, el nuevo técnico blanco, que conoce "muy bien a Kaká", aseguró que su idea es primero "verlo entrenar y después decidir" al respecto de su futuro. Pero la amplia plantilla para la próxima temporada es amplia y en la posición de mediapunta ya hay tres nombres de calidad y mucho futuro: Özil, Modric y el recientemente fichado Isco. No hay sitio para Kaká.
Ancelotti es consciente de esta circunstancia y, fuera del alcance de las cámaras y los micrófonos, ya reconoce que, en principio, Kaká no cuenta en sus planes como uno de los futbolistas más habituales en sus alineaciones futuras.
... Ni ofertas para traspasarle
Por eso, el Real Madrid, esta vez sí, está dispuesto a dejar marchar al mediapunta de Gama, tal y como informaba ayer Paco González en El Partido de las Doce de Cope. Pero la ausencia de ofertas por él, obliga al club a rebajar notablemente el precio que pueden pedir por él; los 20 millones exigidos el verano pasado a quien quisiera llevársele son demasiados y ahora en las oficinas de Chamartín son conscientes de que no recibirán mucha cantidad por él, si es que finalmente no ha de irse libre.
En cualquier caso, al montante, mayor o menor, que perciba el Real Madrid por el traspaso de Kaká, deberá sumársele los 9 millones que le cuesta anualmente su ficha, lo cual vendrá muy bien a las arcas del club a la hora de afrontar nuevos fichajes y sus pertinentes salarios.
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