El FC Barcelona tiene un plan para Tito Vilanova. Quiere que el técnico se quede. Y no sólo que se quede para la próxima temporada, algo de lo que en la Ciudad Condal se ha llegado a dudar. Quieren que se quede para otro año más. El conjunto culé medita ofrecer una ampliación contrato inmediata al entrenador mientras que él, optimista, se lo piensa.
Así lo cuenta este martes el diario Marca. La evolución de los hechos sería sencilla. Ante la buena reacción que está teniendo el técnico en su retorno al banquillo, y como forma de mostrarle su confianza, el club le daría la opción de firmar un año extra a los dos que ya firmó inicialmente.
Con este panorama, el técnico se quedaría en el banquillo del Camp Nou hasta junio de 2015 y no de 2014, como firmó en su día cuando se convirtió en el relevo de Pep Guardiola en el conjunto catalán.
La intención de Tito, afirma este rotativo, sería la de continuar en el Barça. Esto es, pese a la prudencia médica que le han mostrado los galenos desde que recayó en su cáncer, firmar esa ampliación para seguir al frente de la entidad. Y es que ha habido momentos en los que en Barcelona se ha dudado de la posible continuidad del entrenador para el próximo curso.
La responsabilidad de llevar el timón del equipo blaugrana requiere de un sacrificio físico que no es la más apta para la recuperación de la enfermedad que ha sacudido al preparador. Pese a ello, el técnico, tanto en Nueva York como en Barcelona, ha usado sus responsabilidades como método de distracción y esperanza a la que asirse.
Hoy, después de regresar a España, ha tenido un comportamiento similar al que tenía antaño y, salvo las ruedas de prensa, responsabilidad absoluta de Jordi Roura, ha seguido cumpliendo los mismos planes de trabajo que tenía cuando cogió el cargo.
De confirmarse esta mejoría, el entrenador podría firmar la renovación a finales de esta temporada o inicios de la que viene.
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Las dudas de Tito