
El FC Barcelona ha redoblado en los últimos días sus contactos para tratar de incorporar un central de garantías el próximo verano. Los problemas físicos de Carles Puyol y sus últimos roces con la directiva culé por su operación 'furtiva' invitan a pensar en una 'jubilación anticipada' del central catalán.
Aunque Puyol ha renovado hasta 2016 (cuando tenga 37 años, ahora tiene 34), en el Camp Nou nadie pone la mano en el fuego por una continuidad que él desea ("Quiero seguir hasta los 40") pero que, temporada tras temporada, se hace más difícil.
En la presente campaña Puyol ha sufrido hasta tres recaídas de diversas dolencias que apenas le han permitido tener minutos en el conjunto culé. Para colmo, cuando ha estado a tope para partidos importantes, el cuerpo técnico blaugrana ha decidido que fuera Mascherano y no él quien terminase ocupando posición en el centro de la zaga.
Fue precisamente su suplencia frente al Milan, en Champions League, en el Camp Nou, lo que le hizo explotar hasta operarse, por su cuenta, de su rodilla derecha, algo de lo que informó al club el mismo día de la intervención.
Es probable que tras este proceso, Puyol no pueda volver a jugar en lo que reste de temporada. Si a ello se le une la ausencia de Adriano por seis semanas (rotura fibrilar) la conclusión es clara: el Barça tiene un problema grave en defensa.
Por eso se han redoblado en los últimos días los contactos con diversos centrales para conocer su disponibilidad para recalar en la Ciudad Condal. El más deseado es Hummels, del Borussia Dortmund. A ellos se unen David Luiz (Chelsea), Íñigo Martínez (Real Sociedad) o Vermaelen (Ajax).
El otro nombre deseado es Sergio Ramos, pero su fichajes es imposible, por más que sea un futbolista repetido por directivos y jugadores merengues como el hombre que más les gustaría fichar del eterno rival, el Real Madrid.
La llegada de algunos de estos futbolistas no implica necesariamente la salida inmediata de Puyol. Sin embargo, de confirmarse, lo relegarían al puesto de cuarto - quinto central, algo nunca antes sucedido en su carrera. Con 34 años a sus espaldas, le tocaría decidir si seguir en el Camp Nou con un papel de secundario o hacer como Valdés y buscar nuevos retos en tierras lejos de Barcelona.