
El mercado invernal está a punto de terminar. Apenas quedan diez días para que se cierren las opciones de fichar. La siguiente oportunidad será en el mes de junio. En el Barça, salvo sorpresa, no habrá novedades. Al menos en lo que a las llegadas se refiere. Las salidas son asunto distinto. Ahí, un nombre manda sobre el resto. Es el de David Villa.
El futbolista asturiano está pasando por una temporada tortuosa. Ni juega, ni parece que Tito Vilanova tenga intención de que así sea. Es lo que se desprende en Liga y Champions. La Copa es asunto distinto. La Copa, esta vez sí, es la competición de 'El Guaje'. Sin embargo, para él, para Villa, no es suficiente. No se siente cómodo. Se quiere ir del Barça.
Hasta hace poco tiempo, ese deseo parecía aparcado hasta final de temporada. Club y jugador habían acordado su permanencia para, ya en verano, abrirle la puerta. Su precio podría rondar los 15 millones de euros. Los dos parecían de acuerdo en un pacto que, sin embargo, ha tenido un cambio en los últimos días. Villa sigue descontento.
De ahí que su voluntad por dejar el Barça haya vuelto a nacer con fuerza. Así se lo ha dejó claro a Tito Vilanova en una reciente reunión que, según el diario Sport, tuvo como objetivo el que el jugador informase al técnico de su descontento. "Míster, me quiero ir en enero, no me siento importante", le manifestó.
El encuentro, cordial y sin tensiones, según este rotativo, no dio lugar a ninguna discusión. Ni Villa trató de presionar por las malas a Vilanova para jugar más ni éste le respondió de malas maneras.
Sin embargo, dentro de la cordialidad, la reunión sí que sirvió para demostrar que el jugador busca una salida inmediata. Y es que Villa entiende que lo pactado con el club en diciembre ha cambiado en tanto en cuanto sus opciones de jugar, lejos de crecer, han menguado.
Cierto es que Villa se lesionó ante el Córdoba en Copa del Rey, pero no menos cierto es que en el primer partido de Liga de 2013 apenas disputó 20 minutos, cuando el partido ya marchaba 4-0 frente al Espanyol. Villa lo intentó, y no tuvo suerte. Su gesto denotaba malestar. No quiere jugar las sobras.
Este martes, en Copa, ante el Málaga, y ya recuperado de su lesión, se supone que jugará de inicio. Lo contrario, entiende, sería un golpe directo a sus oportunidades por seguir en el Barça.
Mientras, desde el club, se insiste en que Villa es futbolista del equipo hasta junio y que no saldrá del mercado invernal. Sin embargo, las opiniones del conjunto culé se basan en el pacto previo. Lo que suceda de aquí en adelante, tras esta charla técnico-futbolista, es asunto distinto.
Si Villa presionase más todavía, el club podría verse forzado a escuchar ofertas. La Premier League (Liverpool y Tottenham) ya habían preguntado por él y estaban dispuestos a poner hasta 10 millones sobre la mesa, cantidad insuficiente para una entidad, el Barça, que se resiste todavía a deshacerse de un jugador que, tarde o temprano, parece destinado a volar lejos del Camp Nou.