Lo sucedido este domingo en las entrañas del Ciutat de Valencia entre jugadores del Real Madrid y del Levante todavía colea. Mientras los miembros de uno y otro equipo se empeñan en negar las versiones que proceden del otro lado, las pruebas audiovisuales muestran lo preocupante que llegaron a ser las tensiones entre ambos equipos.
Pruebas que percibieron un buen puñado de periodistas y, en general, cualquier persona que rondara la sala de prensa del feudo granota. Esta instalación se encuentra pared con pared con la enfermería del estadio. Fue en esta sala donde, supuestamente, se produjo el principal rifi-rafe entre Pepe y Ballesteros.
Quién trató de agredir a quién y si se produjo finalmente agresión alguna es, todavía hoy, una incógnita. Lo que no es una incógnita es la tensión que se vivió cuando los gritos llenaron los pasillos del estadio. Así lo reflejaron las cámaras de Cuatro que captaron el gran sonido y revuelo provocado por la disputa. Así lo muestra este vídeo:
Pese a todo esto, ninguno de los dos equipos medita llevar a cabo ninguna acción posterior en forma de denuncia o presentación de recursos ante instancia deportiva o judicial alguna.
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El lío eterno