Fútbol

El Real Madrid meditó forzar la salida de Pepe y cómo Mourinho evitó su venta

Pepe durante una reciente comparacencia | EFE

Pepe es el hombre de moda del Real Madrid. Y no lo es para su gusto. Las palabras que dedicó a Iniesta tras el Clásico, la réplica del manchego, que si el vídeo de las patadas, la respuesta de Mourinho y el supuesto interés del Barça... Muchas informaciones que no siempre caen bien a ciertos sectores de la directiva merengue.

Es una tendencia que lleva tiempo repitiéndose. Y que no se consigue frenar. De hecho, el año pasado sin ir más lejos, el club dio un toque de atención por su actuación en el duelo contra el Villarreal. No gustó que insultara al árbitro en el túnel de vestuarios del Madrigal. No gustó que, pese a los consejos para calmarse, él siga con su tendencia a hablar más de la cuenta.

Consejos que siempre han existido. En 2011, la era de los famosos Clásicos de la discordia, el portugués mantuvo una tensa relación con los directivos merengues. Fue cuando Florentino Pérez le dijo aquello de "es que te pierdes muchos partidos entre lesiones y sanciones". Se trató de un dardo en toda regla que compartían muchos directivos del equipo merengue.

En esos momentos el jugador estaba tratando de renovar su contrato con el conjunto blanco. Esa opinión, la de que era un jugador demasiado inestable, era compartida por buena parte de la directiva merengue.

Ante lo elevado de sus exigencias y la mala imagen que estaba dejando, muchos presionaron para que el futbolista no renovara, fuera vendido y se aprovechara el dinero para fichar a otro central de garantías y menos polémico. Fue entonces cuando Mourinho ejerció su poder para frenar esta salida.

El luso no gozaba entonces del poder que tiene actualmente en el club. Todavía permanecía un Jorge Valdano más próximo a los criterios de vender a Pepe que de mantenerlo.

Por eso 'The Special One' se tuvo que esforzar al máximo para conseguir su objetivo. Públicamente dio muchas veces su apoyo a la continuidad del defensa e incluso en círculos privados llegó a vincularlo a la suya propia. Si no le hacían caso con Pepe, se demostraba, decía, que no confiaban en él.

Finalmente Mourinho se salió con la suya y Pepe renovó. El jugador se ha convertido en una de las piezas claves de este Real Madrid.

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