La Liga en Primera División echa el cierre el próximo domingo. Todos los equipos con algo en juego disputarán la última jornada el domingo a las 20:00. Entre ellos, el Real Madrid.
Los blancos se medirán al Mallorca con dos motivaciones por encima de todo: alcanzar los 100 puntos en Liga y celebrar con su afición el título de campeones. Copa que le será entregada en el palco y no el césped. Al contrario de lo sucedido con el FC Barcelona, el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) no otorgará el título a los blancos en el césped. ¿Por qué?
La versión oficial apunta a dificultades técnicas para acceder al campo. El palco del Santiago Bernabéu, dicen desde la RFEF, obliga a realizar una suerte de laberinto para poder acceder al terreno de juego.
Sin embargo, algunos en la capital de España entienden que se trata de una excusa. Si complicado es el acceso de la zona noble del Bernabéu al terreno de juego, también lo es en el Camp Nou, donde no existe si quiera escalera que conecta directamente la grada con el palco, al contrario que en el Bernabéu, donde se puede tomar un atajo entre el público que ocupa el lateral del estadio merengue. Sin embargo, Villar ha entregado las últimas tres Ligas al Barça en el verde del coliseo catalán.
Según el 'diario As', Villar tiene miedo a que su presencia sobre el campo acabe en una sonora pitada del público blanco tras estas temporadas cargadas de polémica por las actuaciones de los colegiados. Muchos madridistas (y algún culé) consideran que tras ciertos errores arbitrales a favor del Barça se encuentra la mano de la propia RFEF y de un Villar que mantiene excelentes relaciones con los directivos culés, al contrario que ocurre con Florentino Pérez.
Cierto es que ambos mandatarios han retomado la cordialidad tras el regreso del presidente blanco a Chamartín, si bien, en su anterior etapa, la tensión marcó el contacto los dos. De hecho, Florentino Pérez fue uno de los más activos promotores de la única candidatura que, desde los 80, cuando accedió al cargo, ha plantado cara con seriedad a Villar, la de Gerardo González.
La reunión entre Villar y Rosell tras las quejas arbitrales procedentes de Barcelona (cita que ninguno descartó y que acabó con la frase "¿Qué más quieres que te dé Sandro?" por parte de Villar) no ha hecho más que avivar un fuego que siempre ha mantenido caliente Mourinho.
El técnico del Real Madrid siempre tiene un mensaje contra el Barça y sobre todo, contra la forma que los árbitros tratan a los culés, en claro agravio, según su visión, con respecto a sus chicos. "Hoy les han pitado dos penaltis así, así", insistió incluso el día que los merengues conquistaron la Liga en San Mamés.
Caldo de cultivo que no favorece la 'sobre-exposición' de Villar en el feudo madridista, campo al que no suele acudir con frecuencia. De hecho, el próximo domingo será la primera vez que se vea al mandatario por el palco blanco.
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