
El FC Barcelona comienza a sentir alguno de los vaivenes propios de las crisis en los grandes equipos. La derrota del sábado ante el Real Madrid no sólo ha traído críticas al planteamiento de Guardiola, sino que también ha enturbiado el ambiente del vestuario. La filtración del once previo al duelo y las tensiones entre Pep y algunos jugadores son algunos de los episodios que amenazan con desestabilizar la tranquilidad del Camp Nou.
Episodios que minan la confianza entre jugadores y entrenador y que hacen que éste ya haya tomado cartas en el asunto en forma de bronca a sus jugadores.
Según varios periódicos tanto de Madrid como de Barcelona, el técnico culé se enfadó ostensiblemente con los suyos después de que la prensa supiera el once culé varias horas antes de que se hiciera oficial.
Medios como Rac1, Punto Pelota, el diario As o el diario Marca se hicieron eco de cuál sería el equipo que jugaría contra los blancos, modificación táctica incluida. No es la primera vez que sucede algo así, pero la importancia del duelo y la petición expresa de Guardiola horas antes de ensayar por última vez en el Camp Nou hizo enfadar más de la cuenta al preparador blaugrana.
El Barça se ejercitó la mañana del sábado en su estadio para dar los últimos retoques al Clásico. Poco tiempo después de ese entrenamiento, algún jugador se 'fue de la lengua' y filtró el once no sólo a un medio, sino a varios. Ahí fue cuando Pep estalló. El técnico se lo hizo saber a los propios futbolistas tras el choque. Lo consideró una falta de respeto a la confianza que debe haber dentro del vestuario.
Piqué y su distanciamento
Este episodio se une a otro 'daño colateral'. La ausencia de Piqué del once del FC Barcelona por segundo partido consecutivo provocó el enfado del jugador culé. Según el diario As, el distanciamiento entre ambos es evidente, por mucho que Guardiola trate de ocultarlo. No es la primera vez.
Hace unas semanas el jugador parecía que había recuperado su mejor versión, pero Pep insiste: "No me gusta tu comportamiento", le habría advertido el viernes cuando le anunció que, por segunda ocasión, se quedaría fuera del once para un choque tan importante como el Clásico.
Puede que el central sea titular este martes contra el Chelsea, pero semejante su suplencia, una vez más, no deja de enfriar unas relaciones de las que se lleva hablando desde hace bastante tiempo.