
El fútbol español volverá a vivir este fin de semana uno de los encuentros más tensos de los últimos años. En el Sevilla-Sporting que se jugará mañana, dos históricos enemigos se cruzarán en la zona de banquillos con final anunciado: como lleva haciendo durante los últimos diez años, Javier Clemente no saludará a Míchel... Y viceversa.
El enfrentamiento histórico entre ambos se remonta a principios de los noventa, cuando el entonces seleccionador español dejó de contar con la Quinta del Buitre, entre la que se encontraba el extremo del Real Madrid, para vestir la elástica de La Roja. Míchel, que acudió al Mundial de Estados Unidos como comentarista de TVE, se ganó la desaprobación de Clemente, quien le recriminó públicamente que su presencia podía "descentrar a los jugadores".
Pero aquel desencuentro inicial alcanzaría su clímax cuando, en un artículo escrito por Michel y publicado por el diario Marca, éste descalificó a Clemente tachándole de "técnico obsoleto" y acusándole de que "el único campo que le interesa es el de golf". Desde aquel momento, en abril de 2002, el de Barakaldo se la tiene jurada al hoy entrenador del Sevilla, negándole el saludo y la palabra en todas las ocasiones en las que han coincidido.
Mañana El Molinón escribirá un nuevo capítulo en el duelo Clemente-Míchel y, a buen seguro, el cruce entre ambos acaparará buena parte del protagonismo del encuentro, aunque ya existe una certeza: no habrá saludo. Y es que, como en el tango de Gardel, para el rencor de Clemente "20 años no es nada".