Es sabido que a José Mourinho no le gusta dejar nada al azar cuando prepara un partido, y ayer volvió a dejar otra prueba de ello. Aprovechando el día libre que concedió a su plantilla, el entrenador portugués se plantó en Marbella para asistir a un partido amistoso del CSKA de Moscú, rival del Real Madrid en la eliminatoria de octavos de final de la Champions League.
Acompañado por sus ayudantes Aitor Karanka y José Morais, y escoltado por un guardaespaldas, Mourinho pudo espiar cómo son algunos aspectos técnicos del juego del CSKA en el partido que enfrentó a los rusos contra el Videoton de Hungría.
Real Madrid y CSKA de Moscú se enfrentarán el próximo 21 de febrero, primero en Rusia, y quince días más tarde en el Santiago Bernabéu, con el pase a cuartos de final de la Champions League en juego.
Entidades
¿Se irá Mou en junio?