Iker Casillas no quería hablar de Mourinho. Pero terminó hablando de él para dejar un titular que no por ser llamativo, deja de tener algo de normalidad. El arquero del Real Madrid relativizó esta madrugada su relación con el entrenador portugués y los famosos roces post Supercopa afirmando que "yo tengo roces con él todos los días". Visión natural a un 'matrimonio' forzado que pasó por momentos duros a principios de temporada.
Porque Mourinho, el Mourinho anterior, el avinagrado técnico que constantemente solía meterse en problemas, decidió no dirigir la palabra a su capitán durante casi un mes después de que éste llamara a Xavi y Puyol tras los incidentes de Barcelona. Aquello no gustó a 'The Special One' y se lo hizo pagar, primero con una suplencia polémica en el trofeo Santiago Bernabéu. Segundo, con esta especie de castigo verbal que acabó con el ya famoso cónclave de Valdebebas.
Fue ahí cuando se aclararon posturas y todo cambió hasta entrar en el estado actual del Real Madrid: un equipo unido y de mejor rollo que nunca entre sus miembros. Pese a ello, el arquero admite que todos los días tiene roces con su entrenador. Es la lógica relación entre un preparador y su jugador referencia.
Pesos pesados que chocan por muchas cosas. "Porque estamos todo el día hablando de fútbol, le digo unas cosas, él me dice otras y al final, el que manda, es él. Hay muchas bromas también, pero cuando hay que estar serios, lo estamos. El míster es una persona abierta", comentó el guardameta en un programa especial de la Cadena Cope con motivo de sus 126 partidos como interncional.
"Qué cabroncetes sois. Mira que no quería hablar del Real Madrid y al final casi me hacéis la envolvente", comentó Iker en referencia a que la entrevista había sido pactada para hablar sólo de la Selección.
"¿Pero te creó algún problema aquella llamada?", insistía el periodista. "Con Mourinho no tengo ningún problema. Todo está genial", despejó el arquero al tiempo que añadía una anécdota. "Fue de los primeros en felicitarme por las 126 internacionalidades. Me dijo que me estaba haciendo mayor", bromeó.
El guardameta puso especial énfasis en dar relevancia a los próximos cinco partidos de Liga del Real Madrid (Valencia, Atlético de Madrid, Sporting, Barça y Sevilla) y los de Champions. Sobre todo a estos últimos. "Si pasamos como primeros nos tranquilizaremos mucho y podremos pensar sólo en la Liga", afirmó.
Entre tanto, mirando a 'La Roja', Casillas dejó claro que le da miedo pensar más allá de cada partido porque "nunca sabes lo que puede pasar. ¿Y si mañana me lesiono y no juego más? Hay que ser cautos", repitió.
El capitán español tildó de "estupidez" las duras críticas surgidas por el choque de España en Wembley ante Inglaterra y se excusó afirmando que "con la clasificación ya conseguida, en pleno mes de Noviembre y con la tensión de los clubes, es complicado ser perfectos siempre", dijo.
Un mes sin hablar